El recién electo rector de la Universidad Autónoma de Yucatán (UADY) José de Jesús Wiliams, tendrá un enorme reto ante los problemas financieros y demandas sindicales que enfrenta la máxima casa de los estudios, y que de no manejarse con auténtica destreza podría llevar a esa institución a una debacle paulatina.
Al parecer son demasiadas las consideraciones sindicales y de jubilación que tiene sobre sí la UADY y que limitan cada vez más su margen de operatividad para darle prioridad a los aspectos de demandas escolares y académicas.
La Universidad Autónoma que tiene un origen social, pudiera acabar por limitar su interés primordial que es la educación e impartición académica, acosado por problemas sindicales y de prestaciones.
En ese sentido, la SEP, el gobierno Federal y el gobierno de Yucatán, tendrían que intervenir en un momento dado, para garantizar la vigencia plena de la máxima casa de los estudios en la entidad. (desdeelbalcon.com)