Llamó particularmente la atención que tras el agrio debate entre diputados del PRI y del PAN en el Congreso del Estado, la bancada de 6 legisladores del blanquiazul, presentarán demandas contra 6 ex directores del ISSTEY, por el presunto faltante y quiebra financiera que enfrenta esa dependencia estatal y que afectará a jubilados y pensionados, y a la burocracia estatal en general.
Ante la negativa, desinterés o falta de capacidad de la directora del ISSTEY, María Isabel Rodríguez Heredia, para explicar qué encontraron en esas instalaciones y la magnitud del problema, los diputados del PAN, dejan a un lado su papel de legisladores, de hacer leyes, para convertirse en fiscalizadores y denunciar presuntos desvíos.
¿Y la Contraloría Estatal? ¿La dirección del ISSTEY? ¿Y el SAF? Y es que además, todavía faltaría que la titular de esa dependencia explique por qué un organismo ajeno a la dependencia es la que está ofreciendo créditos a la burocracia, ganando intereses que no ingresan al ISSTEY sino a las arcas de esa institución financiera particular.
Digno de tomar en cuenta, que así sea, cuando se supone que el ISSTEY lo que necesita ahora son recursos y bien valdría la pena que esos intereses sobre créditos ingresen a sus arcas y no a un consorcio particular, que se antoja fue una maniobra que, al menos, en esas oficinas «legalizó» o promovió el agio, que por cierto, se supone, está prohibido en Yucatán.
Y con las denuncias presentadas a lo mejor y se acaba abriendo la «caja de pandora»
Desde el Balcón