Pues el conflicto no pasó a mayores entre Movimiento Ciudadano y el PAN tras el incidente con el alcholímetro del precandidato a la alcaldía de Mérida, Renán Barrera Concha, pues los dirigentes de ambos partidos finalmente decidieron respaldarlo, y dar vuelta a la página.
En un principio, la líder del partido naranja, Silvia López Escoffié, manifestó su preocupación y molestia por el arresto adminsitrativo de Barrera, y hasta le recomendó que se retirara de la candidatura. En respuesta, el dirigente panista Raúl Paz Alonzo le pidió que no se metiera en la vida interna del blanquiazul, y le recordó que a este partido, según lo acordado en la alianza electoral, le corresponde decidir quién será el abanderado para ese puesto.
Claro, el caso pudo agravarse, por lo que el diputado Paz y el ex alcalde de Mérida fueron a visitar a doña Silvia para tratar de calmar los ánimos, y dejar claro que el famoso Frente sigue en pie en Yucatán. Por su puesto, no faltó la fotografía en redes sociales como prueba de que se contentaron.
Eso sí, no faltó quien dijera que a Movimiento Ciudadano no le convenía “ponerse sus moños”, pues salen ganando con el ofrecimiento de dos candidaturas a diputaciones locales en Mérida –incluido el distrito IV, que es bastión panista- y la segunda fórmula del Senado, tomando en cuenta que ese partido ni siquiera cuenta con prerrogativas estatales.