Cuentan los enterados -de fuentes mucho muy confiables- que el segundo barrapies que le pusieron a Mauricio Sahuí Rivero para atajarle el paso a sus pretensiones de ser el candidato del PRI a la alcaldía de Mérida, tiene que ver con sus filias cercanas a Ivonne Ortega Pacheco y que a cambio se le ofreció una Secretaría dentro del gobierno de Yucatán.
«No… no gracias… no estoy buscando trabajo», dicen que respondió el político priista a gente de buen nivel dentro de su mismo partido y que su frustrada candidatura aleja cualquier posibilidad de «unidad» priista para Mérida, al menos, de verdad, porque de dientes para afuera, se pueden decir muchas cosas.
Los «sahuiistas» aseguran que fue no sólo una jugada no muy limpia para dejarlo fuera de la candidatura sino que además resultó ser una «ofensa» para el político y diputado federal. “¿Dos veces seguidas y con el mismo?… ¿y cuando iban parejos en las encuestas?», señalan sus seguidores.
Después de esto, seguramente ninguno de los «sahuiistas» querrá remojarse en la campaña del Nerio «Nerito» Torres Arcila, y de nuevo tendrá el argumento que hizo eco en quienes quisieron escucharle para conseguir por segunda vez la candidatura. «Perdí por Angélica (Araujo Lara)», ex alcaldesa meridana del PRI. ¿Y ahora qué será? ¿por culpa de Mauricio Sahuí?.. En fin… cosa de priistas.(desdeelbacon.com)