Este padecimiento puede repercutir en la salud física y mental de las personas y afectar su desempeño laboral.
Mérida, Yucatán, 3 de diciembre de 2016.- Las personas que se desempeñan en ámbitos laborales muy tensos corren el riesgo de desarrollar el Síndrome de Burnout, padecimiento que se caracteriza por generar estrés crónico y que puede manifestar físicamente con dolores de cabeza, agotamiento, incluso gastritis, lo que podría afectar el desempeño de los trabajadores.
El maestro en Psicología Aplicada en el Área Clínica, Daniel Solís Santamaría, indicó que este padecimiento se caracteriza por mantener un estrés crónico o muy prolongado, ocasionado por diversos factores, -emocionales, interpersonales, laborales o familiares- que llevan al individuo a presentar una fatiga permanente a nivel físico y mental, la cual repercute en un bajo desempeño laboral.
El especialista en salud mental, comentó que en ocasiones los trabajadores desconocen que sufren el padecimiento, ya que por general, puede confundirse con un nivel de compromiso o estar ‘muy calificados en sus labores’, sin embargo, el estrés al que son expuestos puede llevar a sentimientos de ansiedad y tristeza.
Solís Santamaría, señaló que nadie que se encuentre trabajando, está exento de padecer el síndrome del burnout, pero que es más común encontrar el padecimiento en personal del área de la salud, es decir, médicos, enfermeras, psicólogos, trabajadores sociales o en otras áreas como las personas que tienen tratos con clientes y docentes.
“En general cualquier personalidad que sea muy autoexigente o perfeccionista, puede caer en este síndrome”, recalcó psicoterapeuta.
Acotó que para contrarrestar o evitar el síndrome del burnout, las personas deben aprender a poner límites en el trabajo, tomarse tiempo para descanso, o bien dedicarse alguna actividad recreativa para mitigar los efectos del estrés.
Solís Santamaría, recomendó que para que exista un mejor rendimiento en el trabajo, es primordial tener un descanso adecuado y «dejar los problemas laborales en su lugar, no llevarlos a la casa».
El psicólogo recomendó acercarse a un profesional para identificar los síntomas, para posteriormente, crear estrategias que controlen el síndrome, según las necesidades particulares del sujeto.
Finalmente explicó que para disminuir los efectos del estrés negativo, se necesita un entrenamiento para que la persona poco a poco, se vaya alejando de las situaciones que lo presionan o estresan. (Guillermo Castillo)