Un descanso oportuno y adecuado evita obesidad y padecimientos mentales
Mérida, Yucatán, 14 de enero de 2020.- Un estudio reveló que los hábitos de sueño de los yucatecos podrían llevarlos a padecer Alzheimer, enfermedad que actualmente sufren pocas personas en el estado, según la Secretaría de Salud Federal (SSA).
Además, la doctora Gloria Arankowski Sandoval, reveló que la falta de sueño puede influir notablemente en la epidemia mundial de sobrepeso y en el caso de Yucatán, en ser de los estados con mayor número de personas obesas.
De igual forma, reiteró que las nuevas tecnologías son un enemigo natural del descanso y que ese “insomnio provocado” puede llevar a un sobrepeso marcado en los jóvenes y adultos.
Un estudio de la Fundación Pasqual Maragall, especializada en la investigación del Alzheimer, ha encontrado modificaciones en la estructura cerebral que sugieren un vínculo entre el insomnio y el desarrollo de esta enfermedad neurodegenerativa.
La investigación, realizada con personas sanas, ha encontrado que quienes padecen insomnio presentan cambios en algunas zonas del cerebro que también resultan afectadas en etapas tempranas de Alzhéimer.
El daño cerebral en esta dolencia neurológica echa a andar mucho antes de que el paciente desarrolle los primeros síntomas.
En Yucatán, la doctora Gloria Arankowski Sandoval, directora del laboratorio de Neurobiología del Centro de Investigaciones Regionales “Hideyo Noguchi”, apuntó que el Alzheimer es una enfermedad multifactorial, pero sin duda, el sueño puede ser un factor importante.
“Cuando dormimos, nuestras células cerebrales se regeneran para crear recuerdos nuevos. Por eso es importante dedicarle una buena sesión continua a nuestro descanso, y así prevenir enfermedades mentales como depresión o el propio Alzheimer”, dijo la académica.
Respecto al aumento de peso, señaló que es durante el sueño cuando se regulan nuestras enzimas digestivas, por lo que el no dormir la cantidad de horas recomendada para cada edad puede crear ansiedad y fallas en nuestro organismo, creando un sobrepeso en la persona con hábitos irregulares de sueño.
“Lo que nos toca a nosotros es crearnos hábitos regulares de sueño. La siesta, hay que decirlo, no sustituye a las horas de sueño regulares, hay que dormir 6 u 8 horas de corrido. Y si no podemos hacerlo, entonces debemos ver a un especialista y evitar a tiempo todas estas complicaciones”, finalizó.
Jorge Eduardo Herrera Correa