La Reforma Hacendaria redujo 18% la dependencia con el petróleo y creció la base de contribuyentes, dijo Videgaray.
CIUDAD DE MÉXICO, 29 de agosto de 2015.– El secretario de Hacienda y Crédito Público, Luis Videgaray, anunció que no aumentarán los impuestos ni la deuda, ni mucho menos se aplicará IVA en medicinas y alimentos el próximo año.
En la plenaria de la bancada del PRI en el Senado, adelantó que el precio del barril de petróleo, que contendrá el proyecto de la Ley de Ingresos de la Federación, será de 50 dólares.
También expuso que no se dará marcha atrás al contenido de la Reforma Hacendaria, por lo que no habrá flexibilización ni en las tasas que cobra ni en el régimen de deducciones. “¿Cómo vamos a perder pesos cuando está cayendo el precio del petróleo? La reforma se sostiene por convicción y por necesidad”, dijo.
Mencionó que la reforma cumplió sus objetivos, pues se redujo en 18% la dependencia de los ingresos petroleros y la base de contribuyentes creció 12 millones.
NI MÁS IMPUESTOS NI DEUDA: VIDEGARAY
Ni aumento de impuestos ni más deuda, mucho menos la aplicación del IVA en medicinas y alimentos habrá en 2016, porque esta vez no serán los ciudadanos quienes carguen con el peso de contener los efectos de la caída en los precios del petróleo, sino que será el gobierno el que se apriete el cinturón, anunció ayer el secretario de Hacienda, Luis Videgaray.
Ante senadores del PRI, Videgaray Caso adelantó que el precio del barril de petróleo que contendrá el proyecto de la Ley de Ingresos de la Federación será de 50 dólares, porque la adquisición de cobertura, de 49 dólares por barril, permite una estimación significativamente superior al precio internacional, pero sin dejar de ser prudentes.
Reiteró también lo que les dijo la semana pasada a los diputados electos del PRI, que la inestabilidad cambiaria y financiera llevará a ajustar a la baja la estimación en el tipo cambiario y las proyecciones de crecimiento.
Luis Videgaray expuso a los priistas que el precio del barril del petróleo que se propondrá a la Cámara de Diputados será algo cercano a los 50 dólares por barril.
“Cometeríamos un gravísimo error en suponer cuentas alegres y sostener el gasto público a partir de estimaciones no fundamentadas del precio del petróleo. Lo importante es que tenemos ya las coberturas que nos permiten fijar el precio del petróleo claramente superior”, dijo.
Explicó que el gobierno tiene tres caminos para compensar la caída de los precios del petróleo: subir los impuestos; endeudarse o apretarse el cinturón y explicó que el presidente Enrique Peña Nieto decidió ajustar el gasto.
“No habrá incrementos a los impuestos existentes. El Presidente de la República no habrá de proponer un solo incremento a ningún impuesto existente y, por supuesto, tampoco ningún nuevo impuesto. Y el endeudamiento tampoco es un camino.
“Le toca al gobierno federal apretarse el cinturón. Enfrentaremos la caída de los ingresos del gobierno con menor gasto del gobierno. Esto implica que el gobierno se apriete el cinturón precisamente para no afectar a las familias mexicanas, para no afectar a los contribuyentes; para no generar obstáculos al crecimiento económico. Si algo México ha aprendido en las últimas décadas es el valor de la estabilidad, y la responsabilidad empieza por la estabilidad fiscal”, detalló el funcionario a los priistas.
DESCARTAN FLEXIBILIZAR REFORMA FISCAL
México no dará marcha atrás a la Reforma Fiscal, por lo que no habrá flexibilización ni en las tasas que cobra, ni en el régimen de deducciones que contiene, porque ha demostrado su eficacia para ayudar a México, afirmó ayer el secretario de Hacienda, Luis Videgaray.
“¿Cómo vamos a perder pesos en un momento en que está cayendo de manera tan dramática el precio del petróleo? La reforma se sostiene, por convicción y por necesidad”, aseguró el funcionario.
Dejó en claro que el próximo 8 de septiembre, el gobierno federal planteará al Congreso de la Unión precisiones en torno a algunos conceptos que, a lo largo de los dos años de aplicación de la Reforma Hacendaria, han demostrado que pueden mejorarse, las cuales representarían facilidades para las empresas con bajo costo recaudatorio.
Ayer, durante una reunión a puerta cerrada que sostuvo con los senadores del PRI, Luis Videgaray les dijo que no existe posibilidad de flexibilizar, porque “el horno no está para bollos”, expresó.
Insistió en que no es posible bajar las tasas impositivas o modificar el régimen de deducciones y describió como “tiros de precisión” las propuestas que se harán para ajustar algunos aspectos que han pedido los empresarios y que buscan fomentar la productividad, sin lesionar los ingresos tributarios. (Excelsior)