Internos reciben atención para evitar depresión y suicidios.
Mérida, Yucatán, 26 de febrero de 2022.- Especialistas en Psicología señalan que los internos de los centros de readaptación social del Estado sufren las secuelas de una crisis de su salud mental, que provocó el confinamiento por la pandemia del Covid-19.
“La pandemia vino a cambiar la situación que viven las personas dentro de los centros penitenciarios; la ley establece que las personas privadas de su libertad deben gozar de algunos derechos, sin embargo, ésta tuvo que ser modificada por la pandemia”, señaló el director del Area de Psicología del Centro de Reinserción Social de Yucatán (Cereso), Juan Chi Iuitz.
Recordó que todas las actividades como eventos deportivos, talleres y programas de capacitación fueron suspendidos, por lo cual los internos tuvieron que pasar gran parte del día en sus celdas con el fin de proteger su salud.
Por ello, dijo, hubo constante acompañamiento psicológico porque se incrementaron las crisis, pero el hecho de que la persona privada de su libertad tuviera la oportunidad de tomar una terapia ayudó a sobrellevar el confinamiento.
«Al inicio de la pandemia se atendían cuatro pacientes por mes, sin embargo, este número aumentó conforme se fueron retomando las actividades ya que pasaron hasta a 300 consultas de salud mental por mes», manifestó en su conferencia virtual: “El confinamiento dentro del confinamiento: experiencias del Cereso en pandemia”.
Chi Iuitz indicó que los principales retos que tuvieron que enfrentar estuvo el cierre de las visitas familiares, pues esto desató cierta incertidumbre tanto en los reclusos como en sus familias, pues no sabían por cuanto tiempo se dejarían de ver.
Comentó que actualmente estas consultas se siguen ofreciendo con el fin de evitar depresión o suicidios en internos, ya que todavía hay algunas restricciones para evitar contagios de covid.
(Jorge Euán)