El 20 de enero, Teherán comenzará a frenar su programa nuclear.
BRUSELAS, 13 de enero de 2014.— El 20 de enero entrará en vigor un acuerdo para que Irán frene partes de su programa nuclear, a cambio de un alivio a las sanciones en su contra, que dará a potencias mundiales y a Teherán seis meses para poner fin a una disputa que ha elevado el riesgo de una guerra en Medio Oriente.
“Las capitales han confirmado el resultado de las negociaciones en Ginebra (…) el acuerdo será implementado a partir del 20 de enero”, dijo la portavoz Marzieh Afkham a los periodistas en Teherán, según informó la agencia semioficial de noticias Mehr. La jefa de Política Exterior de la Unión Europea, Catherine Ashton, afirmó que las partes pedirán ahora a la agencia nuclear de la ONU que verifique la implementación del acuerdo, alcanzado el pasado 20 de noviembre entre Irán, Estados Unidos, Francia, Reino Unido, China y Rusia, además de Alemania.
El presidente de EU, Barack Obama, recibió con beneplácito el anuncio y dijo que Washington dará un “alivio modesto” a las sanciones contra Irán en la medida en que la República Islámica cumpla con el compromiso. “Vetaré cualquier legislación que aplique nuevas sanciones durante la negociación” de un acuerdo a largo plazo con Irán, agregó. También precisó que sigue la “labor crítica de perseguir una resolución integral que aborde nuestras preocupaciones sobre el programa nuclear de Irán”.
Teherán comenzará el 20 de enero a desmantelar sus arsenales nucleares y parte de la infraestructura que hace posible el enriquecimiento de uranio. A cambio, el país verá el alivio sobre algunas de las sanciones económicas en su contra, incluyendo la suspensión de restricciones sobre exportaciones de petroquímicos, dijo un alto funcionario estadounidense, quien agregó que ese tipo de alivio inmediato —que dependerá de que inspectores nucleares de la ONU confirmen que Irán está reduciendo el enriquecimiento de uranio— incluirá importaciones para su sector automotor y el comercio con oro y otro metales preciosos.
El secretario de Estado de Estados Unidos, John Kerry, advirtió que la próxima etapa en las negociaciones serán “muy difíciles”.
Poco después de la entrada en vigencia del acuerdo provisional, dijo un funcionario iraní, ambas partes comenzarán a negociar una resolución final de sus diferencias sobre una actividad que Occidente sospecha que apunta a obtener la capacidad para fabricar armas nucleares.
Irán asegura que su programa de energía atómica tiene como objetivo sólo la generación de electricidad y la producción de isótopos para uso médico, aunque intentos previos iraníes de esconder actividad nuclear delicada provocaron preocupación internacional. El acuerdo de noviembre pareció detener una caída hacia una guerra en Medio Oriente, por las aspiraciones nucleares iraníes, aunque diplomáticos advierten que no será fácil concretarlo.
El viceministro de Relaciones Exteriores iraní, Abbas Araqchi, afirmó que el acuerdo permitirá a Teherán dejar de cumplir si ve que sus socios no llevan a cabo su parte en el compromiso. “No confiamos en ellos» , declaró Araqchi a la televisión estatal, reflejando sospechas entre Irán y Occidente que dan cuenta de lo que han sido prolongadas negociaciones.
Según EU, el alivio general a sanciones otorgado a Irán bajo el acuerdo equivale a cerca de 7 mmdd; 4.2 mmdd corresponden al acceso a ingresos iraníes actualmente bloqueados y mantenidos en el exterior. (Agencias/El Universal)