Kazuhiro Kusakabe, de 21 años, fue detenido y estaba siendo interrogado; se encontró un tanque grande lleno de gasolina en la camioneta tipo van que conducía
TOKIO
Un hombre en una camioneta tipo van atropelló a varios peatones el martes por la madrugada en una calle donde la gente se había reunido para las festividades de año nuevo en el centro de Tokio, hiriendo a ocho personas, informó la policía.
El sospechoso, Kazuhiro Kusakabe, de 21 años, fue detenido y estaba siendo interrogado, dijo un funcionario de la Policía Metropolitana de Tokio con la condición acostumbrada de que se le mantenga en el anonimato.
Se sospecha que él trató intencionalmente de matar a las personas conduciendo el vehículo por la calle. Las imágenes de la cadena de televisión NHK mostraron una pequeña camioneta con toda la parte delantera destrozada, así como agentes y personal de emergencias llegando apresuradamente al lugar.
Una novena persona resultó herida después de que Kusakabe bajara del coche y le diera un puñetazo, apuntó la policía. Su estado no se supo de momento.
Se encontró un tanque grande lleno de gasolina en el auto, dijo la policía. El sospechoso parecía haber planeado incendiar su coche, informaron el periódico Mainichi y otros medios de comunicación japoneses. La policía se negó a pronunciarse sobre los informes, alegando que esos posibles motivos seguían siendo objeto de investigación.
El atropello ocurrió en Takeshita Dori, una vía bien conocida por los turistas y los amantes de la cultura pop y la moda que corre junto al santuario Meiji en Harajuku, en el distrito de Shibuya
Cada Nochevieja, la línea de tren que incluye la estación de Harajuku funciona toda la noche, para la gente que recibe el año nuevo con una visita al santuario.
Japón es una nación relativamente libre de delincuencia, con estrictas leyes de control de armas. En 2008, un hombre condujo su coche contra una multitud en el popular distrito de compras electrónicas de Akihabara, se bajó y emprendió una embestida de acuchillamientos contra los presentes. Siete personas murieron. (Excélsior)