Debió haber dado aviso a las autoridades desde el principio: Gina Villagómez
Huhí, Yucatán, 3 de octubre de 2020.– A más de veintitrés días de la desaparición de la joven Erica Anai Cetz Dzul, el alcalde de Huhí, Roger Benítez Espínola, juega un papel trascendente, pues podría ser responsabilizado por haber sido omiso legalmente, por no turnar el caso a otras autoridades y por no brindar acompañamiento a la familia de la víctima, toda vez que tuvo conocimiento de los hechos a las pocas horas de lo ocurrido.
Bajo ese contexto, la doctora e investigadora especializada en temas de género, Gina Villagómez Valdés, explicó que si bien la desaparición del 10 de septiembre rebasa las competencias de un municipio, no significa que no deban activarse los protocolos de búsqueda y canalizar a los familiares con las autoridades competentes, en este caso, a la Fiscalía General del Estado (FGE) y la Secretaría de Seguridad Pública (SSP).
La presunta responsabilidad del alcalde, surge luego de darse a conocer que la familia dio aviso a la Policía Municipal de Huhí 24 horas después de la desaparición, no obstante, de acuerdo con el hermano de la chica, Luis Rafael Cetz Dzul, “su caso no fue tomado con seriedad”, y fue luego de 11 días cuando le recomendaron interponer una denuncia ante el Ministerio Público.
En una entrevista para Desde el Balcón, Luis Rafael relató que –ante la desesperación– acudieron al Palacio Municipal para denunciar los hechos, pero la única respuesta que recibieron fue que la buscaran –por su propia cuenta– en todos los hospitales de Mérida, y luego en el Servicio Médico Forense (SEMEFO).
De acuerdo a los hechos, el Ayuntamiento de Huhí no activó ningún protocolo, y varios días después recomendó que interpongan una denuncia ante la FGE con sede en Izamal.
El entrevistado comentó que ellos nunca habían pasado por una situación similar y que creyeron que con dar aviso a las autoridades municipales era suficiente.
“Nos hicieron perder tiempo, varios días después nos recomendaron denunciar ante la FGE de Izamal; creímos que con dar aviso al municipio, las autoridades encargadas de la investigación ya estaban informadas, y eso no fue así”, lamentó.
RESPONSABILIDAD DEL ALCALDE
Villagómez Valdés explicó que el ciudadano podría no conocer la ley, pero que para eso están las autoridades que lo representan, para cumplir con los acuerdos en contra de la violencia y turnar este caso a instancias superiores.
La especialista declaró que la desaparición de Erica reveló posibles inacciones de parte del edil panista, pues al ser una autoridad con autonomía, tiene derechos y obligaciones que respetar y cumplir.
Recordó que en el último año de la administración de Rolando Zapata Bello se firmó un acuerdo entre el Gobierno del Estado con los 106 ayuntamientos para cooperar en los casos de violencia contra las mujeres, e incluso, los municipios se comprometieron a tener una persona que represente al Instituto de Equidad y Género de Yucatán (IEGY), actualmente, elevado al rango de Secretaría de Mujeres del Estado (SEMUJERES).
Agregó que la falta de acompañamiento se debe a la poca capacitación que reciben los uniformados y las autoridades municipales en temas de género, pero que esa situación no era justificación, pues el alcalde debió haberse comunicado a SEMUJERES para averiguar cómo abordar el tema y escuchar recomendaciones. Sin embargo, eso no pasó.
“Por ley, el alcalde Roger Benítez Espínola debió haber actuado en consecuencia y cometió el grave error de darle vueltas a una familia desesperada, humilde, y en una situación de riesgo, porque no sabemos si fue el ex novio violento o un grupo criminal quien la capturó”, reiteró.
Comentó que una desaparición no es cualquier cosa, no es el robo de una casa o bicicleta, es un asunto de primer nivel y debieron actuar tal y como ocurre en los casos de una emergencia médica, llevar a la familia a la instancia correspondiente para su atención.
Añadió que la autoridad municipal debió hacer su trabajo toda vez que los familiares manifestaron desde el principio que en la relación de Erica con su ex pareja (Francisco Javier “N”) había evidencias de violencia, él insistía en regresar y sospechosamente fue la última persona en verla con vida.
“Con esta información se debieron haber encendido los focos rojos, pero para el alcalde eso no fue importante, no sabemos si Francisco Javier “N” fue citado a declarar y por qué no fue turnado a las autoridades en su momento”, sentenció.
La FGE fue notificada hasta el día 21 de septiembre, y “si un alcalde no sabe qué hacer cuándo hay la desaparición de una mujer, o cuando hay violencia, precisamente esa autoridad no está cumpliendo su responsabilidad”, advirtió la doctora.
Cabe señalar, que Francisco Javier “N” tenía 45 años, era concesionario de taxis de la ruta Mérida-Huhí y se quitó la vida el miércoles 30 de septiembre por la mañana. Según testigos, habría violentado a Erica durante su relación que terminó hace dos meses.
ALCALDE COLOCA LÁMPARAS
La familia explicó a Desde el Balcón, que hace siete días el alcalde Benítez Espínola mandó a colocar lámparas en la calle donde desapareció la joven, toda vez que por años el lugar había permanecido en oscuridad por las noches.
Esta situación llamó la atención de la Villagómez Valdés y coincidió que también recibió la misma información de una parte de la población, quienes se preguntaron con extrañamiento por qué hasta ahora se ponen las luces, justo cuando la desaparición de la mujer apunta a un feminicidio, o en el mejor de los casos a que fue privada de su libertad.
Javier Escalante Rosado