Los aparatos inhibidores prácticamente están inservibles
Cancún, 16 de febrero de 2017.- Los inhibidores que fueron colocados en la cárcel durante la administración de Félix González Canto, prácticamente están inservibles, ya que de ocho aparatos, tres “sirven” en lapsos, pero el resto no. La inversión fue de un millón y medio de pesos, pero de acuerdo con el Centro de Comunicación, Cómputo y Comando (C-4) el sistema para bloquear llamadas no da para más.
Actualmente el Centro de Reinserción Social (Cereso) de Cancún está desprotegido y a la merced de los extorsionadores porque los ocho inhibidores que fueron instalados en septiembre de 2010, no recibieron mantenimiento.
Personal de la Policía Estatal, Ministerial y Municipal realiza cuatro operativos al mes, es decir, uno por semana en los que encuentran celulares a internos, además de tarjetas de memoria, entre otras cosas que les aseguran.
En seis meses que lleva la administración de dicho centro, han asegurado cerca de 50 celulares a internos, los cuales fueron enviados a la ciudad de Chetumal, para ponerlos a disposición de la Unidad de Análisis de Información e Inteligencia (UDAI).
El departamento de la UDAI depende de la Secretaría Estatal de Seguridad Pública (SESP), encargado de extraer toda la información posible de los aparatos electrónicos como conversaciones, fotografías, videos y mensajes.
La unidad hace su trabajo de inteligencia, la información que obtienen es para utilizarla a favor del combate de la delincuencia organizada, que operan desde a dentro del Cereso.
La información que se ha recabado de alguno de los celulares ha llevado a las autoridades investigadoras a saber dónde los internos ocultan la droga, quiénes la introducen, entre otra información.
Incluso las indagatorias señalaron que los elementos de la Policía Estatal son los que introducen la droga y objetos prohibidos al centro, lo hacen en las mismas patrullas y en complicidad con los vigilantes de las torres las pasan al interior.