Sin políticas públicas adecuadas, los menores de la entidad ven frenado su progreso y desarrollan tendencias hacia el suicidio
Mérida, Yucatán, 30 de abril de 2019.- Los niños yucatecos se enfrentan a la falta de políticas públicas que garanticen sus derechos a la educación, a una vida sin violencia y a la salud, tanto física como mental, pues el Estado son varios los menores que se han suicidado.
De acuerdo con el INEGI y en el marco del Día del Niño, en México viven 40 millones de infantes , lo que cual significa que uno de cada cuatro mexicanos tiene entre 0 y 17 años, de los cuales el 62 por ciento vive en la ciudad y 38 por ciento en el campo.
En Yucatán, de los poco más de 2 millones de personas que radican en el estado, 35 por ciento son niños, es decir, 800 mil. De ellos, 32 por ciento tiene de 0 a 5 años; 34 por ciento de 6 a 11, y el resto de 11 a 17 años de edad.
Con base en estos índices, en el Estado 21 por ciento de los niños y niñas viven en hogares indígenas, un 26 por ciento habla maya, mientras que un 11.3 por ciento no no habla español.
Ante este panorama, María Jesús Ocaña Dorantes, directora de Casa Crisal, asociación que brinda apoyo y protección integral a mujeres que han sufrido algún tipo de violencia sexual, afirma que el problema de los niños yucatecos se agudiza ante la falta de políticas públicas concretas, un bajo presupuesto para su desarrollo y un alto índice de ellos que viven en pobreza extrema.
“En Yucatán, las asociaciones civiles hemos abierto foros para discutir sobre los derechos de niños y adolescentes; hay voluntad para garantizar sus derechos; se visibilizan políticas públicas y buenas prácticas de Gobierno, sin embargo, éstas solo están dirigidas a la primera infancia, es decir, a los infantes de cero a seis años, pero las autoridades no contemplan la segunda infancia que va de los siete a los 11 años y menos la adolescencia de 11 a 18 años”, explicó.
“La Secretaría de Educación Pública, por ejemplo, ofrece desayunos a los niños hasta el primero de primaria pero el resto ya no, lo cual es una práctica de discriminación porque no cubre la totalidad de su desarrollo”, precisó.
Por su parte, el vocero del colectivo AVE, integrado por el Centro de Integración Juvenil, Casa Crisal y Escuela de Carácter, Joaquín Torres Aburto, dijo que los principales problemáticas de la infancia yucateca es la falta de formación de los padres, es decir “la omisión de cuidados que deriva en que el menor caiga en adicciones, que sea víctima de abuso sexual, físico y bullyng, y finalmente la criminalidad”.
Manifestó que respecto a la niñez, México es un país en el que se incumplen de manera generalizada los derechos de la niñez, ya que persisten profundas desigualdades entre los estados.
“En el colectivo AVE trabajamos en favor de los niños y adolescentes de Yucatán para darle voz a este sector de la población; por ello, acudimos ante las autoridades para aportar en la garantía de sus derechos y ayudarlos a salir de alguna situación de vulnerabilidad como es las adicciones, violencia y criminalidad”, puntualizó.
Al respecto, el responsable del programa de Prevención del Suicidio de la SSY, Salvador González, comentó que la Subdirección de Salud Mental trabaja en la investigación para tener elementos que permiten mejorar las estrategias de prevención del acto suicida.
“La dependencia cuenta con personal profesional que a su vez capacita a los psicólogos, orientadores, profesores y padres de familia para que estén atentos a los signos que indican la posibilidad de un suicidio”, manifestó.
Precisó que el grupo más propenso a cometer suicidio es el que va de 18 a 38 años, el cual representa la etapa más productiva de la población, “no obstante se trabaja con la población de la segunda infancia y la segunda infancia en la prevención de este problema de saud pública”.
Jorge Euán