El periodista Pablo Ferri Tórtola, quien dio a conocer el “caso Tlatlaya”, lamentó el actuar del ejército mexicano en hechos de violaciones a derechos humanos.
Mérida, Yucatán, 25 de febrero de 2015.- El periodista Pablo Ferri Tórtola, quien hace unos meses sacó a la luz pública el “caso Tlatlaya”, declaró que hoy México no está mejor que hace tres años, pues se agrava la inseguridad y la violación a los derechos humanos.
“Hay nueve mil nuevas personas desaparecidas tan sólo en el gobierno de Enrique Peña Nieto, estamos hablando de un promedio de 52 personas cada mes”, ejemplificó el periodista de origen español, minutos antes de participar en una mesa panel sobre la información como mecanismo de promoción de la seguridad ciudadana.
En entrevista, dijo que luego de los asesinatos de civiles en manos del ejército mexicano en Tlatlaya, y que no intervinieron para evitar la masacre de los estudiantes de Ayotzinapa, existe preocupación de la población mexicana tras el actuar de las fuerzas armadas.
“El ejército mexicano en un caso estuvo involucrado en una violación a derechos humanos, por decirlo así, que es el caso Tlatlaya, en donde según la PGR ejecutó a 8 personas, pero según la CNDH pudieran ser hasta 15; y en el caso de Ayotzinapa hay rumores que indican su participación, aunque sea pasiva, de no auxiliar a los estudiantes que luego desaparecieron. En todo caso es preocupante que un instituto como el ejército esté señalado como responsable de situaciones así”, explicó.
El reportero de la revista Esquire Latinoamericana, criticó que en el país ser periodista es una de las profesiones más peligrosas, pues según estadísticas recientes, más de 100 han sido asesinados en los últimos años, cuando lo único que han hecho es contar a la sociedad la realidad que está pasando.
“Es lamentable que en México no se proteja a los periodistas que quieren contar verdades, y que pongan en riesgo su vida por hacer su trabajo de informar a la sociedad”, agregó.
Ferri Tórtola señaló que no hace falta irse a Veracruz o Guerrero para que el periodista corra peligro, pues recordó el caso de un reportero que fue golpeado por policías municipales de una localidad de Yucatán sólo por fotografiar al pariente de un alcalde que protagonizó un choque automovilístico. (Herbeth Escalante)