Los hombres tienden más a atentar contra su vida, sin embargo, el INEGI revela que existe una tendencia creciente a realizar este acto en la población mexicana en general.
México, 15 de marzo de 2015.– Desde hace más de 20 años que en México el mayor número de casos consumados de suicidio son cometidos por hombres, de acuerdo a estadísticas reveladas por el INEGI.
Este es uno de los problemas de salud púbica que se ha intensificado en el país en dicho periodo, pues es una práctica que cada vez es más común entre los ciudadanos de ambos géneros.
Y es que desde 1990 al año 2012, existe una tendencia creciente sobre los suicidios consumados para la población mexicana en general. La tasa se duplicó al pasar de 2.2 a 4.7 casos por cada 100 mil habitantes.
Durante los 22 años que el INEGI estuvo monitoreando el comportamiento de los suicidios en el país, se destaca que el mayor número de casos al año se han registrado en el sexo masculino.
Los principales métodos que se han detectado para quitarse la vida, según el estudio revelado, son el ahorcamiento, el estrangulamiento y el de sofocación, tanto para hombres, como para mujeres.
Sin embargo, el segundo método para los hombres, fue el de dispararse con un arma, mientras que las mujeres usaron el envenenamiento por gases, vapores, alcohol o plaguicidas.
Entre el total de los suicidios que ocurrieron durante el año 2011, por ejemplo, el 80.8 por ciento fueron consumados por hombres, mientras que el 19.2 correspondieron a las mujeres.
Esto significa que por cada suicidio que comete una mujer, ocurren cuatro consumados por los hombres.
Según el INEGI, en la estadística de mortalidad del 2011, el total de suicidios cometidos ese año fue de 5 mil 718.
Esto implica una tendencia creciente, debido a que de 1990 a 2011, para la población en general, la tasa aumentó al pasar de 2.2 a 4.9 suicidios por cada 100 mil habitantes.
La tendencia para el siguiente año se mantuvo en dicho promedio, pues el número registrado fue de 5 mil 549 casos de suicidios consumados, de los que el 80.6 por ciento fueron realizados por hombres, y el 19.4, por mujeres.
En ese mismo año el principal lugar para realizar estas prácticas según los estudios del INEGI, tanto para hombres como para mujeres, fue dentro de las viviendas particulares.
El suicidio es la principal razón por la que los adolescentes mexicanos pierden la vida, pues durante el 2012, se registraron 826 casos.
El estudio del INEGI califica como adolescentes a los jóvenes de entre 15 y 19 años de edad.
Según el último censo realizado por el INEGI, en el año 2010, en México habitan 112 millones 336 mil 538 personas de todas las edades.
El problema del suicidio ha tenido como una de las causas principales, el hecho de depresión en torno al desempleo o a una relación matrimonial de fracaso.
Y de las 32 entidades que componen al país, Campeche y Yucatán son los dos estados con el índice más elevado, con 9.5 y 9.3 por cada 100 mil habitantes, respectivamente.
Según el INEGI, el estado con el menor índice de suicidios durante el año 2011, fue Guerrero, con 2.6 por cada 100 mil ciudadanos.
Sin cultura para la salud mental
La experta en suicidios, Patricia Cerda, enfatizó que si en México existe una tendencia al alza en los casos de suicidios en las últimas dos décadas, es porque en el país no existe una cultura que fomente la salud mental.
Cerda es miembro del Sistema Nacional de Investigadores nivel 2 del Conacyt y también es coordinadora del Centro de Investigación para la Comunicación de la Universidad Autónoma de Nuevo León.
“La gente piensa que la salud mental, o es un asunto de ricos, o es un asunto de locos”, expresó. “Y no es así. La gran enseñanza que nos dejan las personas que se quitan la vida es que hay un porqué, sobre lo que nos falta para llegar a tomar esas decisiones tan extremas”.
La experta explicó que si en México es más común que los hombres consumen un acto de suicidio, se debe a la carga social respecto a su rol como proveedores de una familia, o de diferentes responsabilidades.
“Aunque las mujeres lo intentan más, al final lo logran menos. No hay una razón específica que podamos atribuirla, pero hay quienes dicen que tiene qué ver con la agresividad propia de la testosterona.
“También hay quienes dicen que son demasiadas las cargas que suelen dársele a los varones como proveedores”.
Otra de las razones más comunes por la que los hombres consuman el suicidio, es el fracaso laboral ante la falta de oportunidades.
Cerda comentó que en el caso de las mujeres se destaca el hecho del sentimentalismo, en torno a una relación de fracaso o valores éticos que fueron violentados.
Abandono emocional
A nivel nacional, el suicidio en el rango de adolescentes se ha disparado, y la doctora Patricia Cerda lo vincula con los casos de violencia intrafamiliar que no fueron resueltos a tiempo.
“Los motivos también cambian con las edades. Cuando se trata de suicidio entre adolescentes y niños, tiene mucho que ver el enojo con los padres o con los abandonos emocionales de la familia”.
Una mala situación económica en torno a la vida de los jóvenes adultos, tiende a ser una razón principal por la que personas de ambos géneros consuman un suicidio, incluso aún más que una cuestión de un amor mal correspondido.
“Siempre es multifactorial, o sea que no siempre se trata de una misma causa.
“Por ejemplo, en la gente mayor, el suicidio está muy vinculado con las enfermedades crónico degenerativas”.
Sobre aviso no hay engaño
Patricia Cerda enfatizó que si una persona fracasa en su primer intento de suicidio, lo intentará una segunda, tercera, o cuarta ocasión, hasta consumarlo.
Es por eso que realizó un llamado a familiares y amigos de quienes hacen comentarios o actos suicidas, para acercársele y tratar inmediatamente dicho problema.
“Sabemos que un 10 por ciento de las personas que se quitan la vida, tienen trastornos vinculados a bipolaridad o esquizofrenia.
“Entonces, son personas que con su medicamento controlado, pueden tener una vida alejada del esquema del suicidio, pero tienen qué tener su medicamento y ciertos cuidados”.
También demandó a los gobiernos federal y estatal, de poner mayor seriedad para resolver este tema.
Aunque la doctora no precisó el monto total destinado a nivel estatal, aseguró que la cantidad es mínima.
Además, exhortó a la Secretaría de Salud de los tres niveles de poder, de aumentar su compromiso para que los índices de suicidios disminuya en los próximos años.
“Y es que esto depende de la Secretaría de Salud. Esta dependencia debería de estar apoyando estos grupos”.
Cadena de la tragedia
Patricia Cerda aseguró que después de que una familia sufre por el suicidio de algunos de sus miembros, es común que inicien enfermedades de diferente tipo.
“A corto plazo lo primero que se activa entre los familiares son enfermedades como diabetes, alta presión y otro tipo de enfermedades, y es por la misma impresión que no esperaban que el muchacho o la muchacha se quitara la vida.
“Junto con este tipo de enfermedades que se activan en la familia, están también aquellas que creen que pues ellos no hicieron lo suficiente por la persona, y por eso raen unos complejos de culpa, y por eso el patrón se repite y alguien más se quita la vida”.
Es por eso, dijo, que como sociedad, en México se deben de activar programas o fórmulas para que la salud pública sea de los temas más importantes entre los ciudadanos.
“Si a alguien le duele una parte del cuerpo, va al doctor. Pero si hay algún problema de depresión, no hay con quién o a dónde acudir. Ese también es parte del problema”.
Cerda realizó una investigación en relación a los casos consumados de suicidio durante el periodo 2004 al 2010.
Detectó que las familias que viven una experiencia de suicidio fallida o consumada, deben de acudir en carácter de urgente e importante a terapia con un experto, y no dejarlo solo con el apoyo moral y de amor dentro del hogar.
“Las ideas suicidas nos están indicando que esa persona está pasando por una etapa de trastorno”. (Reporte Índigo)