Suman 311 fallecidos en Afganistán y Pakistán por el terremoto de magnitud 7.5; los insurgentes anuncian que no impedirán los esfuerzos de ayuda.
PESHAWAR. 27 de octubre de 2015.– Equipos de rescatistas intentan llegar a las zonas de Pakistán y Afganistán más afectadas por el sismo que sacudió la región el lunes, mientras la cifra de víctimas mortales subía a 311 personas.
Según responsables afganos y paquistaníes, 237 personas fallecieron en Pakistán y 74 en Afganistán luego de un terremoto de magnitud 7.5 que tuvo su epicentro a mucha profundidad en las montañas Hindu Kush, en la provincia afgana de Badajshan, escasamente poblada y que limita con Pakistán, Tayikistán y China.
Las autoridades chinas luchaban por llegar a las zonas más afectadas cerca del epicentro, registrado 73 kilómetros al sur de Faybazad, la capital de la provincia de Badajshan.
En Pakistán, el valle del Swat y las áreas próximas a las localidades de Dir, Malakand y Shangla, en las montañas de la provincia de Jyber Pajtunjwa estuvieron entre las afectadas por el sismo. El pueblo paquistaní más proximo al epicentro es Chitral, mientras que del lado afgano estaría el distrito Jurm, de la región de Badajshan.
Más de 2 mil personas sufrieron heridas en el temblor del lunes, que también dañó cerca de 2 mil 500 viviendas en Pakistán, según las autoridades.
En Afganistán, Ismail Kawusi, portavoz del Ministerio de Salud, dijo que los datos recibidos hasta el momento de hospitales del país contemplaban 457 heridos. Antes, Wais Ahmad Barmak, ministro afgano responsible de la gestión de desastres, dijo que 74 personas murieron y 266 estaban heridas.
El gobernador de Badajshan, Shah Waliulá Adib, dijo que en total se habían visto afectados 13 distritos de la provincia, con más de mil 500 casas destruidas por completo o parcialmente.
Sólo en su provincia, la cifra de víctimas de 11 muertos y 25 heridos habrá subido al final del día, una vez los equipos lleguen a las zonas y pueblos remotos, dijo Adib.
Hacen falta helicópteros para llegar a las aldeas más remotas, muchas de las cuales son inaccesibles por carretera en el mejor de los casos, explicó el gobernador. Ahora, los desprendimientos y deslaves han bloqueado las pocas carreteras de la zona. Las autoridades tenían preparados alimentos y otros productos básicos, señaló, pero «llegar allí no es fácil».
Badajshan es una de las regiones más pobres de Afganistán, pese a sus inmensas reservas minerales. Sufre terremotos frecuentes, pero las cifras de muertos suelen ser bajas por su escasa densidad de población. Menos de un millón de personas viven dispersas en sus extensiones de valles y montañas. También se producen inundaciones, ventiscas de nieve y deslaves.
TALIBANES APOYAN LABORES DE RESCATE
Los talibanes pidieron a las agencias de ayuda que sigan entregando suministros de emergencia.
Los esfuerzos de grupos de ayuda para evaluar el daño eran obstaculizados por una situación de seguridad inestable que ha hecho que muchas de las áreas afectadas sean riesgosas para socorristas internacionales y tropas gubernamentales.
Sin embargo, los talibanes, que este año han reforzado su campaña de insurgencia islamista contra el Gobierno de Kabul, indicaron que no impedirán los esfuerzos de ayuda.
El Emirato Islámico llama a nuestros compatriotas bien intencionados y a las organizaciones de ayuda humanitaria a que no cejen en sus esfuerzos para proveer de refugio, alimento y suministros médicos a las víctimas», dijeron los talibanes en un mensaje de condolencias a los afectados por el sismo, usando su nombre formal.
«Y, en forma similar, ordena a sus muyaidines en las áreas afectadas a entregar toda su ayuda», agregó.
En Pakistán, las autoridades trabajaban para determinar la extensión de los daños y el número de víctimas, dijo Ahmad Kamal, portavoz de la Autoridad Nacional de Gestión de Desastres. También la región tribal de Bayur, en la frontera con Afganistán, se vio golpeada por el sismo, con docenas de viviendas dañadas en otras zonas tribales.
El ejército utilizó el martes helicópteros para transportar suministros a las víctimas e ingenieros militares intentaban recuperar comunicaciones interrumpidas por deslaves originados por el movimiento telúrico, dijo el teniente general Asim Salim Bajwa, portavoz del ejército.
El primer ministro de Pakistán, Nawaz Sharif, visitó el martes la localidad de Shangla, en la provincia noroccidental de Jyber Pajtunjwa, donde al menos 49 personas perdieron la vida y otras 80 resultaron heridas por el movimiento telúrico. También el martes, Sharif asistió a una reunión informativa en Islamabad sobre los daños causados por el sismo.
Según un comunicado, Sharif alabó las operaciones de recate del país e insistió en que Pakistán era «lo suficientemente capaz como recatar y rehabilitar a los afectados por el terremoto» y que se haría todo lo posible para ayudar a los afectados. Dijo que su gobierno anunciará pronto un paquete de ayudas para compensar a los afectados. (Excelsior)