La epidemia de extiende en Africa. Lo anunció la presidenta de el país más afectado por la epidemia. Además, pusieron en cuarentena a dos populosos barrios.
Liberia, 20 de agosto de 2014.– La presidenta de Liberia, Ellen Johnson-Sirleaf, declaró el toque de queda para combatir la expansión del ébola en el país más afectado por el virus, donde ya murieron 466 personas desde que surgió el brote en marzo pasado
La medida regirá desde esta noche, desde las 21 hora local (18 hora argentina) hasta las 6 (3 hora argentina), dijo Johanson- Sirleaf en un discurso a la nación pronunciado anoche.
En otra de las medidas adoptadas, la presidenta decretó el cierre de todos los centros de ocio desde las 18 (hora local). Además, las autoridades pusieron en cuarentena los populosos barrios de West Point, en la capital, Monrovia, y Dolo Town, situado en el condado de Margibi, a una hora de la capital.
«Esto significa que no habrá entradas ni salidas de estas áreas», dijo Johnson-Sirleaf. Según la líder liberiana, que pidió colaboración a los ciudadanos, las medidas «buscan salvar vidas y hacer los esfuerzos del Gobierno para combatir la enfermedad más efectivos y rápidos».
En West Point días atrás se escaparon de un centro de aislamiento 37 pacientes. Allí viven unas 75.000 personas. El sábado, un grupo de habitantes del barrio irrumpió en una escuela reconvertida en centro de atención y sacó de allí a los pacientes, que se sospecha estaban infectados con ébola. Los afectados fueron encontrados el martes y llevados a otro hospital.
Liberia registra hasta el momento 834 casos de ébola, según cifras de la Organización Mundial de la Salud (OMS). De estos pacientes, 466 han muerto.
Mientras tanto, Nigeria comunicó la muerte de una quinta persona por el virus, informa el diario «Vanguard». Se trata de la médica Ameyo Stella Adadevoh, que se contagió al tratar a un asesor del gobierno liberiano que viajó a Nigeria pese a estar enfermo. Patrick Sawyer fue la primera persona que murió de ébola en Nigeria. Adadevoh fue una de las primeras que tuvo contacto con él, indicó el ministro de Salud nigeriano, Onyebuchi Chukwu.
En Nigeria hay 15 casos confirmados o bajo sospecha y otras 170 personas en observación, pero por ahora el número se mantiene estable, el brote no se está extendiendo.
Según el último recuento de la Organización Mundial de la Salud (OMS), desde el pasado marzo la epidemia cobró la vida de 1.229 personas e infectó a 2.240 en África Occidental. (Clarín)