Advierten de prevenir esta afección.
Mérida, Yucatán, 21 de julio del 2023.-El Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Yucatán orienta sobre recomendaciones para la obesidad infantil, así como los servicios que brinda en prevenir y dar seguimiento a esta afección que puede generar muchas otras complicaciones en la salud y hasta poner en riesgo la vida, si no recibe un seguimiento médico pertinente.
La obesidad también afecta a niñas y niños, siendo una enfermedad crónica caracterizada por el exceso de grasa en el organismo y que se presenta cuando el niño o la niña tiene un sobrepeso mayor al 20% del peso ideal.
El doctor Manuel Sevilla Domingo, Endocrinólogo Pediatra del IMSS en Yucatán, reiteró que la obesidad en niñas, niños y adolescentes puede ser el principio de enfermedades consideradas de adultos, tales como diabetes mellitus, problemas en pies y espalda, trastornos hormonales, hipertensión arterial, várices, así como cáncer. Además, destacó la importancia de considerar el impacto emocional que la obesidad puede tener en los menores, incluyendo daños en la autoestima, ansiedad, depresión y pensamientos negativos.
La obesidad registrada a temprana edad se debe principalmente a una alimentación inadecuada y la falta de actividad física. Aunque la genética también puede influir, es relevante mencionar que si los padres presentan obesidad o las madres la presentan durante los primeros tres meses de gestación, existe la posibilidad de que los hijos padezcan sobrepeso durante la niñez o adolescencia. Para prevenir y atender estos casos, el Seguro Social en la entidad cuenta con Unidades de Medicina Familiar (UMF) y personal médico capacitado para realizar valoraciones, confirmar diagnósticos y proporcionar orientación a través de los Módulos PrevenIMSS, donde también se incluye la medición de peso y talla.
Para erradicar este problema de salud en Yucatán, es fundamental seguir ciertas recomendaciones:
1. Procurar brindar a los menores una alimentación saludable.
2. Orientarlos a beber entre 6 y 8 vasos de agua pura al día.
3. Fomentar la realización de alguna actividad física.
4. Realizar, en la medida de lo posible, cada comida de forma regular (tres comidas principales y dos colaciones).
5. Para la elaboración de las colaciones, seleccionar frutas y verduras de temporada.
6. Preparar de preferencia alimentos al vapor, asados, a la plancha, hervidos o al horno, para evitar freír, capear o empanizar.
7. Evitar meriendas con alimentos procesados, exceso de azúcares refinadas o con mucha sal.
Finalmente, es esencial que los tutores o padres y madres de familia estén al pendiente de la salud de los menores y los lleven a un chequeo preventivo mínimo una vez al año, ya que la obesidad es una enfermedad completamente prevenible.
Si los menores presentan dificultad para moverse, agacharse y realizar actividades cotidianas, dificultad para respirar, dolores articulares, problemas para dormir y cansancio crónico, es importante llevarlos a un chequeo médico para descartar riesgos y recibir el seguimiento correspondiente.