Aumentan feminicidios, asesinatos y desapariciones de niñas y adolescentes, advierte la Redim.
México, DF. 23 de septiembre de 2014.- De 2006 a mayo de este año, más de mil 750 menores han muerto en sucesos relacionados con el combate a la delincuencia organizada, señala el Informe alternativo sobre la situación de garantía de derechos de niñas, niños y adolescentes en México, que la Red por los Derechos de la Infancia (Redim) entregará este jueves al Comité de Derechos del Niño de Naciones Unidas en Ginebra, Suiza.
En conferencia de prensa, la Ong advirtió que en los últimos años se incrementaron los feminicidios, asesinatos y desapariciones de niñas, niños y adolescentes.
Jennifer Haza, directora general de Melel Xojobal, organización defensora de los derechos de infantes y jóvenes indígenas, aseguró que dada «la escalada de violencia social que vivimos en diferentes partes del país, aunada a la situación de lucha contra el crimen organizado, se ha incrementado el porcentaje de homicidios de niñas y adolescentes entre 15 y 17 años, pues sólo en 2011 y 2012 aumentó 12.2 por ciento frente a 9.1 en el caso de los hombres, esto es, tres puntos porcentuales de diferencia».
En compañía de Juan Martín Pérez García, director ejecutivo de dicha organización, y Luis Enrique Hernández, director de El Caracol, organización no gubernamental que trabaja con personas en situación de calle, dijo que con base en datos de organizaciones civiles, a escala nacional hay 810 niñas desaparecidas de las cuales 361 tienen entre cero y 12 años, y 449, entre 13 y 17 años de edad.
En ese contexto, en el apartado Niñas, niños y adolescentes en contexto de violencia armada, el informe indica que entre 2000 y 2012 la tasa de muertes por homicidios en la población de 0 a 17 años pasó de 1.7 muertes por cada cien mil habitantes a cuatro muertes por cada cien mil; es decir, el incremento fue de 235 por ciento.
«En algunos estados este aumento ha sido mayor que en otros. Por ejemplo, en Chihuahua, el incrementó de la tasa de homicidios en niñas, niños y adolescentes de entre 0 y 17 años fue de 351 por ciento en el mismo periodo, pasando de 2.9 muertes en 2000 a 13.1 muertes en 2012. En Guerrero, el aumento fue de 535, y en Tamaulipas, 600 por ciento».
Sin embargo, detalla que la población adolescente de 15 a 17 años es la más afectada por «el recrudecimiento de la violencia». De 2007 a 2012, la tasa de mortalidad por homicidios en este grupo creció 5.3 por ciento por cada 100 mil habitantes, a 16.3 por ciento.
Adolescentes, los más vulnerables
“Este considerable aumento no se observa en los otros grupos de edad de niñas y niños, y se puede decir que gran parte del incremento en la tasa de homicidios en la población de 0 a 17 años se debe al crecimiento de homicidios en los adolescentes de 15 a 17 años.
«Sólo en 2012, las muertes violentas en este último grupo de edad representaban 70 por ciento del total de los homicidios en personas menores de 18 años».
Según el texto, «la ausencia de institucionalidad que se ocupe de proteger y hacer cumplir los derechos de la infancia tiene una estrecha relación con los vacíos de poder y de gobernabilidad que se presentan en las zonas con mayores índices de violencia».
Además afirma que la corrupción y los procesos de cooptación de las instancias de la administración pública por parte de los grupos del crimen organizado tienen un efecto directo sobre la situación de niñas, niños y adolescentes en estos territorios.
No hay dinero para dar atención
El documento de la Redim asegura que no existen las asignaciones presupuestales suficientes para garantizar los derechos de la infancia en todo el territorio mexicano.
Ante estas condiciones de violencia que vive el país, la Redim recomendó al gobierno federal aplicar un sistema integral de garantía de los derechos de la infancia, que articule y coordine las acciones de los sectores de la administración pública federal, estatal y municipal en materia de protección y difusión de los derechos; coordinar desde la Secretaría de Gobernación la realización de un diagnóstico nacional sobre todo violencia a menores y adolescentes en México; atender y eliminar todas las formas de violencia y estructurar un sistema de información y recopilación de datos como un componente importante del sistema integral.
“Mediante el sistema de información se deben reunir datos sobre niñas y niños muertos por acciones de la delincuencia organizada –y por contraofensiva del Estado– y sobre menores reclutados y utilizados por grupos armados en acciones violentas; torturados, explotados sexualmente y otros delitos dentro del contexto de la violencia armada.”