En cien años, se acabaría la selva en Yucatán

Actualmente la deforestación se debe a la expansión de proyectos agrícolas y ganaderos, señalan

Mérida, Yucatán, 11 de septiembre de 2017.- La directora de la Junta Intermunicipal Biocultural del Puuc  (Jibiopuuc), Minneth Medina García declaró que si se sigue con el ritmo de deforestación se estima que en 100 años, la selva en la Península de Yucatán desaparecería.

Comentó que los impactos negativos de esta dinámica de deforestación sería en contra de la biodiversidad de la entidad “ya que somos un corredor biológico natural”; por lo que en 20 ó 30 años ya se verían consecuencias “fuertes”.

Medina García dijo que actualmente la reducción en la selva en Yucatán se debe a la expansión de proyectos agrícolas y ganaderos.

“La ganadería extensiva se está desarrollando mucho al sur del estado, donde en ocasiones se requiere una hectárea por vaca”, señaló.

Asimismo, criticó los cultivos en esa zona de la entidad ya que indicó que muchos de esos proyectos “no  están solicitando el cambio de uso del suelo”.

Medina García informó que en la zona Puuc existen aproximadamente 40 mil hectáreas cultivadas con soya y cerca de 20 mil son ocupadas para la ganadería. En ese sentido, señaló que Jibiopuuc se encuentra realizando acciones para hacer una conversión en esta área para instalar 11 parcelas “demostrativas” con insumos orgánicos en soya.

En el caso de la ganadería, la directora de la Jibiopuuc indicó que se encuentra trabajando para que en una hectárea se puedan tener hasta seis ganados, con distintos forrajes endémicos para alimentar a estos animales.

Señaló que anualmente en la entidad se pierden 20 mil hectáreas de selva, por lo que es importante realizar acciones de manera coordinada con diferentes dependencias de gobierno “que apoyan la parte agrícola”.

Comentó que se deben fomentar agroinsumos  orgánicos que sean más “amigables” con el medio ambiente y que el mismo productor pueda desarrollar.

En ese sentido, Medina García dijo que buscan que exista una rotación de  cultivos –contra el monocultivo-, evitar las quemas, el uso indiscriminado de agroquímicos.

Por último, indicó que para evitar la deforestación de la selva en la entidad se necesita educación ambiental, no únicamente en áreas urbanas sino en las rurales, además de proporcionar a los productores “alternativas productivas bajas en carbono”. (Guillermo Castillo)