El Dr. Adrián Curiel Rivera estará al frente del Centro Peninsular en Humanidades y en Ciencias Sociales de la UNAM, sede Mérida.
Mérida, Yuc. 18 de septiembre de 2015.- El día de ayer tomó posesión el doctor Adrián Curiel Rivera como nuevo director del Centro Peninsular en Humanidades y en Ciencias Sociales de la UNAM en Mérida, Yucatán.
El nombramiento estuvo a cargo de la Dra. Estela Morales Campos, Coordinadora de Humanidades, quien destacó que la asignación del Dr. Curiel es importante porque denota una madurez en el Centro para que ahora sea dirigido por un miembro de la misma comunidad CEPHCIS y no de otras instancias de la UNAM, como había ocurrido anteriormente.
Por otro lado, la Dra. Estela Morales destacó que una de las prioridades para la nueva dirección es fortalecer los lazos con otras instituciones del Estado, de la Península de Yucatán, incluyendo Campeche y Tabasco, y del Sureste mexicano.
Por su parte, el doctor Curiel mencionó que “el futuro del Centro se ha materializado en un presente donde, por primera vez, se nos brinda la oportunidad de tomar la batuta de nuestra propia orquesta”.
A continuación enlistamos algunos puntos mencionados en su plan de trabajo 2015-2019.
1.- Apoyar a aquellos académicos en proceso de consolidación profesional; otorgar un trato respetuoso y atento a los académicos del CEPHCIS, a su personal administrativo, de base y de confianza, y alentar a toda la comunidad en el desempeño de sus funciones y en su superación académica.
2.-Trabajar en el mantenimiento, recuperación o establecimiento de la vinculación con importantes instituciones públicas y privadas de la educación superior, nacionales y extranjeras, y de la sociedad civil.
3.-Fortalecer al Centro como un puente de enlace entre las instituciones públicas y privadas de educación superior del Estado y la investigación humanística y social que se efectúa en la Coordinación de Humanidades de la UNAM.
4.-Dar continuidad al trabajo de investigación, docencia, extensión y vinculación, destacando una permanente colaboración con el Centro de Investigaciones sobre América Latina y el Caribe (CIALC) y el Centro de Investigaciones Multidisciplinarias sobre Chiapas y la Frontera Sur (CIMSUR) a fin de desarrollar estudios sobre las áreas del Sureste, Centroamérica y el Caribe.
5.- Consolidar los seminarios permanentes de investigación, coordinados por investigadores y profesores del propio Centro.
6.- Seguir enriqueciendo el programa editorial del Centro, fortaleciendo sus actuales colecciones, y sostener la publicación semestral de la revista Península, para cumplir con los baremos de periodicidad y calidad, y conseguir su inclusión en el Índice de CONACYT.
7.- Preservar la calidad de la oferta docente del Centro en todas sus modalidades: cursos de lenguas, Licenciatura en Desarrollo y Gestión Interculturales, Maestría en Trabajo Social, talleres, diplomados, cursos, etcétera.
8.- Extender el trabajo en Humanidades y Ciencias Sociales a problemáticas del Sureste mexicano, Centroamérica y el Caribe, además de profundizar en investigaciones que se han venido realizando en el Centro sobre fenómenos regionales actuales como la urbanización de Mérida, los cambios en la identidad lingüística, la religiosidad y el patrimonio biocultural, ampliando el campo de análisis a enfoques interdisciplinarios que incluyan las ciencias políticas, la demografía, la economía y el derecho, entre otras áreas de conocimiento.
9.- Involucrar a la investigación humanística y social en los cambios culturales y políticos, nacionales y estatales; por ejemplo, en el último rubro, atendiendo el Plan de Desarrollo Estatal y participando más activamente con el SIIDETEY para proponer enfoques complementarios a los que desarrollan en la región otras instituciones de educación superior, como la Universidad Autónoma de Yucatán y el CIESAS Peninsular.
Ya para terminar el doctor Curiel resaltó que, a partir de una política de cohesión de la comunidad, desde la continuidad y el fortalecimiento de las Humanidades y las Ciencias Sociales, el CEPHCIS reúne los elementos y el potencial necesarios para robustecer la marca de su especificidad académica y seguir coadyuvando, desde los ámbitos de su competencia, en el mantenimiento de la excelencia y el liderazgo académico que caracterizan a nuestra Máxima Casa de Estudios, y extender así con la mayor amplitud posible, los beneficios de la educación, el conocimiento y la cultura a la sociedad mexicana, concluyó.