Especialistas afirman que los 12 nuevos gobernadores tendrán poco margen de maniobra debido a los altos niveles de endeudamiento de las entidades.
CIUDAD DE MÉXICO, 26 de febrero de 2016.- Entre recortes presupuestales y la posibilidad de que continúe el aumento de las tasas de interés, los 12 nuevos gobernadores, que serán electos el 5 de junio próximo, recibirán de sus antecesores administraciones endeudadas y con poco margen de maniobra para gobernar.
El mejor ejemplo de ello es el gobernador de Zacatecas, Miguel Alonso Reyes, quien incrementó su deuda durante su gestión más de mil por ciento, al pasar de 682 millones de pesos al inicio de su gobierno a siete mil 609.4 millones de pesos en 2015.
El costo educativo, en su mayoría el pago por maestros y cambios que hubo en 2011 con respecto al concepto de inversión público-privada, fueron los principales factores que influyeron en el incremento de la deuda de Zacatecas, explicó en entrevista Ricardo de Luna, analista de Fitch Ratings.
Le sigue el gobernador de Chihuahua, César Duarte, quien incrementó sus pasivos 240.81 por ciento, al pasar 12 mil 247 millones a 42 mil 762.1 millones de pesos.
De acuerdo con información de la Secretaría de Hacienda, en el resto de las entidades, donde este año se elegirán nuevos gobernadores, no se quedan atrás.
Gabino Cué, en Oaxaca, incrementó la deuda 185.46 por ciento; Roberto Borge, en Quintana Roo, 123.59 por ciento; Javier Duarte, en Veracruz, 113.39 por ciento; Jorge Herrera Caldera, en Durango, con 102.75 por ciento; y Mariano González Zarur, en Tlaxcala, 100 por ciento.
Veracruz cuenta con montos importantes de deuda, porque la reestructuró, es decir la que tenía a corto plazo, la cambió por deuda de largo plazo. Durante administraciones anteriores y parte de ésta, el mayor lastre fue el gasto corriente y operacional, comentó Tito Baeza, analista de Veracruz en Fitch Ratings.
Para el analista de GACS Consultoría Financiera, todos los gobernadores tienen una visión de muy corto plazo y el corto plazo es lo que dure su mandato.
Al respecto, el analista Rubén Domínguez, de GACS Consultoría Financiera, asegura que “los que lleguen heredarán una situación muy comprometida y con un margen limitado por lo mismo que no existe una visión de largo plazo”.
“Muchos se endeudan de más porque vienen las elecciones en su entidad y quieren asegurar que la gane por lo menos el mismo partido. Por eso se endeudan mucho y lo destinan al gasto, aunque no de manera directa, sino con obra pública. Y cuando termina su mandato no es problema de ellos. A menos de que llegue otro partido y lo comience a auditar”, señaló. (El Financiero)