El presidente afgano, Ashraf Gani, ratifica el deceso del mulá Omar, quien falleció en abril de 2013 en un hospital en Pakistán.
KABUL, 30 de julio.- El presidente de Afganistán, Ashraf Gani, confirmó la muerte del líder de los talibanes, el mulá Omar, en abril de 2013 en Pakistán, un deceso que según laagencia de inteligencia afgana se produjo en un hospital de Karachi.
«El Gobierno de la República Islámica de Afganistán, basándose en información creíble, confirma que el líder de los talibanes, el mulá Omar, murió en abril de 2013 en Pakistán», informó el mandatario afgano en su cuenta en la red social Twitter.
El portavoz del Directorio Nacional de Seguridad (NDS, siglas en inglés), Abdul Hassib Sediqi, dijo que la muerte dellíder insurgente ocurrió en un hospital de la ciudad paquistaní de Karachi (sur).
«El mulá Omar estaba enfermo y fue hospitalizado hace dos años y cuatro meses en un hospital cercano a la ciudad de Karachi. Murió en el hospital, pero no sabemos si falleció por una enfermedad o por otro motivo», agregó.
«Teníamos esta información desde hace dos años, pero ahora es más fiable», agregó Sediqi, quien anunció que difundirá más información sobre la muerte del insurgente en los próximos días.
Las informaciones sobre el deceso del líder talibán se habían multiplicado durante los últimos meses.
En abril, los talibanes difundieron a través de internet la primera biografía oficial del mulá Omar, desmintiendo su muerte en un insólito gesto.
En esta ocasión, sin embargo, los talibanes han guardado silencio desde que esta mañana se produjeron filtraciones de la muerte de su líder y todavía no se han pronunciado al respecto.
La confirmación del fallecimiento se produce en pleno acercamiento entre el Gobierno afgano y el grupo insurgente tras más de trece años de guerra.
En un comunicado al respecto del deceso, el Gobierno de Afganistán destacó que «el terreno para las conversaciones de paz está más allanado que antes» y, por ello, pidió «a todos los grupos opositores armados que aprovechen la oportunidad para unirse al proceso de paz».
El Gobierno y representantes talibanes mantuvieron el 7 de julio en Pakistán su primera reunión oficial, tras encuentros informales en Catar y Noruega en meses anteriores, y se prevé que en los próximos días se produzca una segunda reunión.