Médicos del IMSS lograron que la neonata sobreviviera a pesar de nacer a las 27 semanas y con un peso de 680 gramos.
Mérida, Yucatán, 27 de mayo de 2019.- Un equipo multidisciplinario del IMSS en Yucatán salvó a una niña prematura que nació a las 27 semanas de gestación con un peso de 680 gramos.
Tras cuatro meses de permanecer en el hospital, Valentina ya fue dada de alta y se encuentra en óptimas condiciones.
La bebé nació antes de tiempo ya que su madre presentó un tumor cerebral durante el embarazo, por lo que recibió atención quirúrgica y permaneció en terapia intensiva en el Hospital General Regional (HGR) No. 1 “Lic. Ignacio García Téllez”; su estado de salud era grave y por ello los especialistas decidieron practicar una cesárea de emergencia.
De acuerdo con el titular del servicio de tococirugía, Gilberto Cahuich Méndez, cuando la mujer cursaba 23 semanas de gestación presentó fuertes dolores de cabeza, por lo cual fue enviada al Hospital General Regional No.1, donde al realizarle estudios encontraron un tumor con datos de hipertensión endocraneana.
Esta situación derivó en una cirugía para descompresionarlo, sin embargo, la salud de la paciente se deterioró rápidamente y cayó en estado de coma.
Un grupo multidisciplinario de expertos se reunió para tomar la mejor decisión para el binomio y llegaron a la conclusión de preservar la vida del bebé si tenía un peso mayor a 500 gramos, ya que tendría más posibilidades de sobrevivir.
Se mantuvo a la mamá con vida con ayuda de aparatos y se le suministraron esteroides para que la bebita madurara, en especial sus pulmones y el sistema neurológico. Al tener datos clínicos de muerte inminente de la madre, se decidió la cesárea.
La neonatóloga adscrita al HGR No. 1, Irene Padilla Hernández, explicó que cuando nació Valentina, el 25 de enero de este año, requirió atención especializada en la Unidad de Cuidados Intensivos Neonatales (UCIN), ya que presentó diversas complicaciones como fueron síndrome de dificultad respiratoria, neumonía, hemorragia pulmonar, anemia, displasia broncopulmonar y retinopatía, que fue tratada por especialistas en oftalmología.
“Después de superar estos padecimientos, nuestro equipo multidisciplinario logró que Valentina fuera creciendo y ganando peso, le dimos rehabilitación para que se alimentara de forma normal, con una succión adecuada y actualmente ya pesa dos kilogramos. Es un caso de éxito muy importante ya que con esa prematurez enfrentamos una alta mortalidad; sin embargo, con toda la tecnología y conocimientos con los que contamos podemos sacar adelante a más pacientes y con menos secuelas”, manifestó la neonatóloga.
Jorge Euán