Será sede de un programa piloto para la operación de los “Centros Penitenciarios de Mediana Seguridad”, que será aplicado en los recintos carcelarios de Playa del Carmen y Cozumel.
Cancún, 23 de junio de 2013.- Quintana Roo será sede de un programa piloto para la operación de los “Centros Penitenciarios de Mediana Seguridad”, que será aplicado en los recintos carcelarios de Playa del Carmen y Cozumel para reducir la presión y hacinamiento de las cárceles de Cancún y Chetumal.
El subsecretario de Ejecución de Penas y Medidas de Seguridad de la Secretaría de Seguridad Pública del estado, Jesús Armando Liogon Beltrán, informó que la aplicación de este programa piloto forma parte de los acuerdos firmados por la Conferencia Nacional del Sistema Penitenciario del país el pasado 7 de febrero en Cozumel.
El programa piloto consiste en la operación de Centros Penitenciarios de Mediana Seguridad que, contrarios a los de Alta Seguridad, como El Altiplano o Puente Grande, alberguen a internos cuya pena es mínima, sentenciados por delitos que no sean de alto impacto y que por tanto, su comportamiento no implique un riesgo la convivencia del resto de la población carcelaria.
“Vamos a abatir la sobrepoblación que hay en centros como en Chetumal y Cancún, haciendo una selección de esta población de mediana y baja seguridad y puedan ingresarse a estos centros (de Playa del Carmen y Cozumel).
“El tratamiento será diferente; el perfil de la infraestructura, será diferente; el perfil del personal técnico penitenciario será diferente… todo encausado a crear un programa certificado de mediana seguridad”, declaró.
La razón de que el programa se aplique en los recintos carcelarios de Playa del Carmen y Cozumel, se debe a que su infraestructura -comparada con la de Cancún y Chetumal- es más nueva y cuenta con una superficie disponible para instalar dormitorios, aulas, auditorios, instalaciones educativas, deportivas y culturales con las características necesarias.
Cárceles de Quintana Roo, reprobadas
De acuerdo con el Diagnóstico Nacional de Supervisión Penitenciaria 2012 (DNSP), presentado a finales de 2013 por la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), las cárceles de Quintana Roo se ubican dentro del listado de prisiones reprobadas en México.
El estudio es una evaluación de la situación que impera en los Ceresos, Ceferesos y prisiones militares en México, en torno a las condiciones de estancia e internamiento de los procesados y sentenciados.
De las cinco variables calificadas, Quintana Roo aparece en el lugar 12, de los 18 estados reprobados, con promedio de 4.6 en el rubro de “Condiciones de Gobernabilidad”.
Esta variable se refiere a la normatividad que rige a los centros de Reinserción Social de la entidad, personal de seguridad y custodia, sanciones disciplinarias, autogobierno o co-gobierno, actividades ilícitas, extorsión y sobornos, así como capacitación del personal penitenciario.
La Cárcel de Cancún -con capacidad para alojar a 740 internos, pero con una población de mil 278-; y el Centro de Readaptación Social (Cereso) de Chetumal -con capacidad para mil 190 presos, pero habitado por mil 239- figuran con promedios de 4.4 y 4.7, respectivamente, en “Condiciones de gobernabilidad”.
En materia de “aspectos que garantizan la integridad física y moral del interno”, es decir, la capacidad para alojar y población existente, distribución y separación de internos, servicios para la atención y mantenimiento de la salud, supervisión por parte del responsable del centro, prevención y atención de incidentes violentos y de tortura o maltrato, la cárcel de Cancún está calificada con un 3.9; Chetumal con 4.7.
En el componente de “Estancia digna”, que promedia la existencia de instalaciones suficientes, capacidad de éstas, condiciones materiales y de higiene, así como de la alimentación, la prisión de Cancún alcanza el 4.6; Chetumal, el 5.16.
La medición está hecha en una escala del 1 al 10, que representa las condiciones mínimas que deben existir en un centro, con base en la Constitución, las leyes, tratados y documentos internacionales referentes al tratamiento de las personas privadas de su libertad y en condiciones de internamiento, de acuerdo con la consulta hecha por EL UNIVERSAL.
El Diagnóstico
Para realizar el Diagnóstico Nacional, personal de la CNDH visitó los 101 centros estatales penitenciarios más poblados, en las 32 entidades federativas, que sumaban 170 mil internos.
También se acudió a los 17 centros federales, con una población de 20 mil 300 internos. Asimismo se visitaron tres prisiones militares, con 818 internos.
El estado con la calificación más alta de las 14 entidades aprobadas, es Aguascalientes, con un promedio de 8.2, seguido de Guanajuato, con 7.8 y Baja California, con 7.4. El más bajo de ese listado, es Morelos, con 6.2. (El Universal)