Entre protestas del oficialismo, la Asamblea Nacional de Venezuela aprobó este martes la declaratoria de juicio político contra el presidente Nicolás Maduro.
Caracas, Venezuela, 26 de octubre de 2016.- Luego de una discusión de dos días, el mandatario fue citado para el próximo 1 de noviembre, para que comparezca ante el pleno por presuntas “graves violaciones a la Constitución y a los derechos humanos”.
No obstante, la medida podría ser anulada por el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ), que en agosto pasado determinó que todas las decisiones del Congreso carecen de validez.
Con el objetivo de acortar el mandato de Maduro, la Asamblea Nacional también evaluará la figura de “abandono del cargo”, con el argumento de que el presidente traicionó los designios para los que fue elegido, como respetar la Constitución, la democracia y buscar el bien común. Esa figura contempla la convocatoria a elecciones.
Maduro desestimó la iniciativa, calificándola como un intento de generar zozobra, coordinado desde Estados Unidos.
“Podrán ir a su rincón de amargura, pegar cuatro gritos y de allí no pasarán”, dijo en un acto con miles de seguidores.
Y los parlamentarios oficialistas desestimaron las acusaciones contra Maduro.
“La figura del juicio de responsabilidad política no existe en Venezuela para el presidente de la República”, señaló Edwin Rojas, diputado del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV).
“Han hecho una copia chimba (de mala calidad) del impeachment” contra la expresidenta brasileña Dilma Rousseff, apuntó.
Y en nombre de las Fuerzas Armadas, el ministro de Defensa de Venezuela, Vladimir Padrino López, leyó un comunicado en el que rechazó la existencia de un golpe de Estado en el país sudamericano, como lo declaró la Asamblea Nacional.
“No se ha producido ningún acto de fuerza que obligue la invocación del artículo 333 de la Constitución”, destacó en una declaración transmitida por la televisión estatal, y acusó al Parlamento de pretender realizar una incitación a la insubordinación o sublevación.
Padrino remarcó que la institución castrense es estrictamente profesional y sin militancia política, por lo que reiteró su incondicional lealtad a Maduro.