Diputada va contra bebidas alcohólicas

Presenta Milagros Romero iniciativa para impedir que se vendan por medio de aplicaciones digitales.

Mérida, Yucatán, 13 de junio de 2019.- La diputada de Movimiento Ciudadano Milagros Romero Bastarrachea presentó una iniciativa de decreto para reformar y adicionar diversas disposiciones de la Ley de Salud del Estado de Yucatán, que tiene como objetivo principal disminuir el consumo de bebidas alcohólicas, ya que sus consecuencias representan un grave problema de salud pública.

Su proyecto propone aumentar a 5 cuadras, la distancia entre establecimientos que las expendan, así como prohibir la venta por medio de aplicaciones digitales e instalar dispositivos de alcoholimetría en restaurantes, cantinas y otros puntos donde estén disponibles.

En nombre de su fracción parlamentaria, la legisladora local subió a tribuna para explicar su iniciativa, por medio de la cual pretende, sobre todo, evitar el uso nocivo de esta sustancia en el estado.

indicó que la entidad está en los primeros lugares en alcoholismo, que es el problema de salud pública con mayor arraigo, cuyos costos y consecuencias sociales y sanitarias impiden el desarrollo de familias y comunidades.

“Gran parte de los suicidios, feminicidios, abusos y violencia vienen encaminados por beber alcohol. Yucatán ocupa el segundo lugar en casos de personas por intoxicación alcohólica, tan solo en el 2018 se registraron 10 mil 524 casos, que en su mayoría fueron mujeres”, manifestó.

Explicó que según datos recabados por la red de colaboradores del colectivo Mujeres sin Maquillaje, de enero a octubre del 2018 se registraron cinco feminicidios en territorio yucateco, en donde uno de los detonantes fue el consumo excesivo de alcohol y drogas.

Por eso, esta iniciativa contempla que entre establecimientos dedicados a la venta de alcohol exista una distancia de 500 metros. La misma longitud deberá aplicarse para parques, espacios culturales, áreas deportivas, centros religiosos, zonas trabajo, lugares de docencia y otros similares.

También, establece que no se pueda vender esta sustancia por medio de plataformas digitales, ya que no se garantiza que su destinatario final no sea un menor de edad.

Finalmente, se propone que los establecimientos donde se vende alcohol cuenten con un alcoholímetro para que las personas, por voluntad propia, se hagan la prueba para saber el nivel de alcohol que tienen en la sangre y decidan no conducir si presentan ebriedad o están arriba del límite permitido.

«Lo que buscamos es crear conciencia entre las personas y evitar que salgan a la calle alcoholizadas, ya que el riesgo de accidentes también puede afectar a inocentes», expresó.

Desde el balcón.