En un partido que contó con pocas emociones en las áreas, La máquina y los Diablos dejan todo para el encuentro de vuelta en el Nemesio Díez.
CIUDAD DE MÉXICO, 16 de abril de 2014.- Entre truenos y una lluvia que inundó hasta los pasillos del estadio Azul, Cruz Azul y Toluca empataron en el juego de ida de la final de la Concachampions y se jugarán todo la próxima semana para definir quién de los dos tiene un lugar en el próximo Mundial de Clubes.
El balón pasó más tiempo en control de La Máquina en el comienzo, aunque con tantas faltas y charcos las jugadas de peligro no faltaron. Todo giró alrededor de Gerardo Torrado y Marco Fabián, uno como principal recuperador y el otro siendo el más desequilibrante frente al arco.
En los centros y jugadas dentro del área apareció siempre el guardameta Alfredo Talavera, pegando gritos en las salidas y dándole mayor velocidad a la respuesta de su equipo. Quiso sorprender un par de veces el paraguayo Pablo Velázquez, pero cuando tuvo en frente a los zagueros de Cruz Azul se quedó sin alternativas y terminó rendido.
La ocasión más clara de los visitantes llegaría hasta presentarse el primer error de concentración de Gerardo Flores, quien le permitió disparar con comodidad a Carlos Esquivel y forzó la doble intervención del portero Guillermo Allison.
Por ratos fue más la intensidad de la lluvia que la del partido. A pesar de mostrar ganas y ser arriesgados, los celestes fueron encontrando cada vez menos espacios para poner en riesgo a Talavera. Los Diablos, en tanto, parecieron cómodos con el empate en el primer tiempo y contaron con la fortuna de que a su rival le anularon dos goles por fuera de juego.
Tras el descanso, el cuadro dirigido por Luis Fernando Tena recuperó fuerza y volvió a ser el de la iniciativa. Fabián y Torrado aparecieron de nuevo como los principales ejes, pero a ellos se les sumó el ecuatoriano Joao Rojas con jugadas individuales que crearon desconcierto.
Fabián pudo haber marcado la diferencia, de no ser porque su remate, tras recibir un servicio de Flores, salió por un lado del poste. Toluca reaccionó con un tiro a quemarropa del paraguayo Velázquez frente a Allison, que salió rechazado por el guardameta hacia tiro de esquina.
La Máquina insistió una y otra vez en tomar ventaja, pero cuando volvió a tener una jugada clara, Joao estrelló la pelota en las manos de Talavera después de haberse quedado sin marca en el área.
Dadas las circunstancias, Tena envió al campo a Christian Giménez y al camerunés Achille Emana como último recurso para quebrar el empate, sin embargo, la cobertura de Paulo Da Silva y Miguel Ponce sirvió de escudo para los Diablos.
A la espera de un contragolpe, los visitantes gastaron el tiempo dándole circulación al esférico cada que lo tuvieron y decidieron mantener el empate para el juego de vuelta. La doble atajada de Talavera tras los disparos del Chaco y Fabián sirvió para confirmarlo.
Apelarán castigo a Jesús Corona
La sanción de tres partidos que deberá cumplir el portero Jesús Corona, cuando en primera instancia era de uno, dejó inconformidad y molestia en directivos y el cuerpo técnico de Cruz Azul.
La resolución de la Concacaf, que en la tarde de ayer ampliaba el castigo para el futbolista de La Máquina por un lenguaje soez al final del encuentro ante los Xolos, será apelada en las próximas horas con el fin de que Corona pueda participar en el partido de vuelta de la final de la Concachampions.
«Es increíble. Si ya estábamos sorprendidos de que fuera un partido, ahora con tres es peor. Habrá una protesta por parte de nuestra directiva, no buscamos que se castigue a los jugadores de Tijuana sino que Chuy pueda jugar en la vuelta”, asegura el técnico Luis Fernando Tena.
El Flaco agrega que en toda su carrera no vio algo similar en una sanción que ya estaba impuesta y que cambió, días después, “por obra de la casualidad”. Confía en una posible reducción de partidos, sobre todo apelando a que “en ninguna toma se aprecia una agresión de nuestro jugador. Yo quisiera ver que a alguien que le escupen en la cara reaccione con la tranquilidad que lo hizo Chuy”.
Aunque evita profundizar en el tema, el estratega cementero reconoce que la molestia es compartida también a nivel directivo. A pesar de cómo se han dado las cosas, el técnico de Cruz Azul no cree que exista mala intención en la Concacaf para dañar la imagen de su portero a pocos meses de disputar el Mundial de Brasil. “Estamos pensando en que nuestra apelación tendrá efecto”, concluye, después de que su equipo empatara en casa. (Excélsior)