La Máquina vive un final cardiaco, pero se lleva la victoria por 2-1 ante Pumas. El VAR anula un gol a los universitarios y Pablo Aguilar casi mete un autogol.
CIUDAD DE MÉXICO.
Con algunos trabajos Cruz Azul pudo llevarse la victoria ante una versión de Pumas que mostró garra, la escuadra celeste aprovechó su condición de local y se impuso a los universitarios para ligar su octavo partido sin conocer la derrota y asegurar su boleto a la fiesta grande del futbol mexicano, luego de ganar por marcador de 2-1, pero sin convencer con su accionar futbolístico.
Milton Caraglio mostró los resultados del risotto que les preparó el técnico Pedro Caixinha a los delanteros celestes hace varias jornadas y con un doblete (uno de penal y otro de cabeza) logró darle la victoria a su equipo, llegando a nueve dianas en el Clausura 2019, viviendo su mejor momento desde que llegó al conjunto de La Noria.
Los Pumas demostraron en la cancha del Estadio Azteca lo gris que ha sido su temporada y con el marcador adverso que se llevaron del Coloso de Santa Úrsula, se quedaron sin posibilidades de pelear por un lugar en la liguilla y tanto directiva, cuerpo técnico y jugadores deberán pensar en cerrar de manera digna la campaña y en planear muy bien la siguiente.
Pese a que un penal bien cobrado por Pablo Barrera, al minuto 63, metió a los visitantes en el partido, después de ir por dos goles abajo, no se pudo concretar el regreso de Pumas y les pesó lo que dejaron de hacer en el primer tiempo y la expulsión de Kevin Escamilla para rescatar puntos de su encuentro ante los cruzazulinos.
Cabe destacar que la utilización del VAR fue favorable para los celestes, pues la expulsión de Escamilla fue por esta vía y la anulación del gol de empate de los universitarios fue bien anulado por un fuera de lugar que no había visto el árbitro Antonio Pérez Durán de primera instancia.
Excélsior