Guadalajara pierde 1-0 en su visita a Torreón y regresa la preocupación al Rebaño Sagrado en su lucha por no descender.
TORREÓN, 7 de febrero de 2015.– El Guadalajara no ataca ni genera cambios de ritmo. Más bien es un equipo desconfiado, tanto como defensivo, que en partidos como el de ayer ante Santos Laguna se queda sin armas y es superado en el resultado.
Para muestra están los primeros 45 minutos, en los que el Rebaño no generó ni una sola jugada de peligro en la portería de los laguneros. Por el contrario, en su área sufrió al menos tres ocasiones que pudieron haber terminado en gol de no ser por la falta de puntería del colombiano Andrés Rentería y las atajadas del portero Luis Michel.
A la problemática que enfrentan los rojiblancos, no sólo en la tabla de promedios sino también en su nivel futbolístico, se agrega la noticia de que Ángel Reyna está lesionado del brazo izquierdo, el mismo que en meses pasados le había causado problemas para tener actividad.
Por otro lado, cabe decir que los de Torreón aún no mejoran su forma de finiquitar sus jugadas. Presentan errores en la definición y, aunque son dominadores, no producen los mismos resultados que otras campañas.
Rentería y Javier Orozco han permanecido como las principales opciones del técnico Pedro Caixinha, pero a ambos les sigue costando reflejar en el marcador la superioridad que tiene por momentos su equipo.
Por eso resultó fundamental el gol del caboverdiano Djaniny Tavares, quien, después de ingresar de cambio por Luis Ángel Mendoza a los 54 minutos, venció con un remate cruzado a Luis Michel y abrió la cuenta a favor de Santos Laguna (63’).
Para entonces las dudas eran mayores en el cuadro rojiblanco, aunque así generaron su primera llegada de gol al 70’, con un remate de David Toledo. Aun así, y por más intentos del técnico Chepo de la Torre de adelantar sus líneas en busca del empate, los visitantes se quedaron sin ideas. De hecho, los laguneros estuvieron más cerca de incrementar la ventaja, que su rival de acortarla.
Tavares, además de ser el anotador del único tanto del encuentro, provocó que Jair Pereira y Salcido se descontrolaran con su velocidad y desequilibrio en el desborde.
Y aunque Santos ya no fue tan claro al momento de organizar una seguidilla de pases, sí siguió manejando la iniciativa y buscó por las bandas una mayor profundidad.
Chivas, entre tanto, terminó el partido con más desgaste físico que buen futbol. Ni Omar Bravo ni Isaac Brizuela pudieron marcar diferencia frente a una zaga lagunera que, en todo momento, se mostró segura y confiable.
Con este resultado, los de Torreón comparten el liderato del Clausura 2015 junto con el Tijuana y el Veracruz al llegar a nueve puntos. Chivas, por su parte, se quedó rezagado en la novena posición con siete puntos en cinco jornadas disputadas. (Excelsior)