Las víctimas fueron identificadas como Germaín Muñiz e Iván Añorve; ambos eran originarios de Guerrero
México, 6 de febrero de 2018.- La madrugada de ayer dos sacerdotes fueron asesinados en la carretera Taxco-Iguala, cuando viajaban a bordo de una camioneta blanca doble cabina; en el ataque otras tres personas resultaron heridas.
De acuerdo con el informe de la policía, los hechos ocurrieron a las 4.20 de la madrugada, cuando las personas regresaban de un baile de Juliantla. En la carretera, en la entrada de Taxco, a la altura de la gasera, un auto se emparejo a la camioneta de los sacerdotes y les disparó. Entre los cuatro heridos hay dos mujeres.
El Obispo de la diócesis Chilpancingo-Chilapa, Salvador Rangel Mendoza, confirmó que se trata de los sacerdotes Germaín Muñiz García de Apango, y quien estaba de base en Mezcala, y de Iván Añorve de la Arquidiócesis de Acapulco.
Dio a conocer que la mañana de ayer recibió la llamada del gobernador, pero no pudo contestar, pues estaba oficiando misa. El Obispo condenó lo ocurrido y pidió a las autoridades esclarecer este asesinato y detener a los culpables.
Una de las ocupantes de la camioneta donde se transportaban los sacerdotes y que resultó ilesa Alba Iris “N” de 24 años, estudiante de danza y originaria de Carrizalillo municipio de Eduardo Neri, declaró que habían acudido a la Comunidad de Juliantla municipio de Taxco de Alarcón a un baile y al momento de retornar a sus lugares de origen, un vehículo color rojo les cerró el paso y varios sujetos les empezaron a disparar.
Rechazo
Por su parte, el gobernador Héctor Astudillo Flores expresó su más enérgica condena por el ataque cometido.
El mandatario estatal urgió y pidió a la Fiscalía General del estado de Guerrero que se investigue y proceda contra los presuntos responsables del asesinato.
De acuerdo con declaraciones del gobernador de Guerrero, Héctor Astudillo, en el baile en Juliantla se presentó un incidente, pues al parecer una de las mujeres que formaba parte del grupo no quiso bailar con alguien en el lugar, la mujer era hermana de uno de los sacerdotes. Esta pista se está investigando.
Reacciones
Los obispos de México, congregados en la Conferencia del Episcopado Mexicano, lamentaron el asesinato de dos sacerdotes católicos en Guerrero y exigieron a las autoridades realizar las investigaciones necesarias para dar con los responsables.
Uno de ellos fue el cardenal Francisco Robles Ortega, arzobispo de Guadalajara quien pidió orar por las autoridades y confiar en ellas “para que se actúe conforme a la ley, y se esclarezcan los asesinatos de nuestros hermanos sacerdotes y de todas las personas que claman justicia”.