Ese organismo declaró desierta la convocatoria para ofertar servicios de salud a sus empleados en la península de Yucatán
Mérida, Yucatán, 01 de julio de 2017.– Desde el primer minuto de este sábado, 12 mil trabajadores de Petróleos Mexicanos (PEMEX) en la península de Yucatán se quedaron sin servicio médico y de atención hospitalaria, porque los dos hospitales que concursaron en la licitación pública internacional -Centro de Especialidades Medicas (CEM) y Star Médica- supuestamente no cubrieron los requisitos para cubrir ese procedimiento.
En tanto se realiza una segunda etapa de esa convocatoria de licitación que por lo pronto quedó desierta, los trabajadores de PEMEX tendrían que recurrir a una clínica de Ciudad del Carmen, Campeche o bien cubrir sus gastos médicos urgentes y luego ver bajo qué proceso se los reembolsa la empresa Petróleos Mexicanos.
El problema reside en que la segunda parte de esa convocatoria tardará entre 3 y 6 meses y por tanto en realizarse. En ese periodo, los empleados se quedarán en desamparo médico durante ese tiempo.
Y es que el Contrato Colectivo de Trabajo de PEMEX con sus trabajadores le obliga a proporcionar servicios médicos de calidad y calidez, pero al declararse desierta la convocatoria, los trabajadores quedaron prácticamente en estado de indefensión para recibir su servicios médicos.
Al parecer los dos hospitales privados que brindaban desde hace años los servicios médicos al personal de PEMEX concursaron pero no alcanzaron -no se sabe si por altos o muy bajos costos- la aprobación de la convocatoria y por eso se decretó desierta.
Esta decisión se publicó desde el pasado 22 de junio en el Diario Oficial de la Federación pero no fue sino hasta ayer viernes, que muchos de los afectados se enteraron mediante un cartel que se instaló en el CEM para advertir que no podría proporcionarles los servicios médicos con normalidad.
Ante ese problema, se generó toda una confusión entre los trabajadores de Pemex no sólo activos sino jubilados y pensionados y al parecer el mismo personal no tuvo conocimiento de lo ocurrido ni por parte de su sindicato, ni tampoco por el lado de la empresa.
La gravedad del problema es que en tanto se emite una nueva convocatoria en la que deberán concursar incluso los dos centros médicos que en la primera etapa no ganaron la licitación, el personal de PEMEX a nivel peninsular y en particularmente en Yucatán, no tendrá servicio médico formal ni de urgencia.
Esa situación ha causado malestar e inconformidad contra PEMEX, su sindicato y también con los centros médicos citados que solamente les avisaron mediante un simple cartel. (Yazmín Rodríguez Galaz)