Se entregan diversos apoyos a productores para mitigar el daño
Campeche, Camp., 29 de mayo de 2017.– La mortalidad anual de bovinos es de entre 1 y 1.5 por ciento del total del hato, por diversas causas, pero este año el porcentaje subió a entre 2 y 3 por ciento por el intenso estiaje, falta de agua y alimento verde y animales atascados en los jagüeyes, por lo que se apoya con melaza, bagazo de caña de azúcar, alimento balanceado y sales minerales a los ganaderos, y en el caso de los productores agrícolas, el gobernador Rafael Alejandro Moreno Cárdenas puso en marcha la entrega de fertilizantes, con inversión de 42.3 millones de pesos.
Así lo informó el secretario de Desarrollo Rural (SDR), Armando Constantino Toledo Jamit, al revelar que la sequía impidió buena floración, por lo que —confirmó— la cosecha de miel disminuyó en un 50 por ciento, en relación con la obtenida el año pasado.
Además, “como lo destacó recientemente el gobernador Alejandro Moreno en Hopelchén, tan solo en este año se destinan nueve millones de pesos a la construcción de mil 200 jagüeyes, más del doble de lo que se hizo en los anteriores seis años, y alrededor de cinco millones de pesos para perforar 300 pozos agrícolas, más de lo que se hizo en los dos sexenios anteriores”.
La SDR —explicó—, tiene registradas en todo el Estado más de 16 mil unidades pecuarias con 600 mil cabezas de ganado bovino, “y a través de reportes de las asociaciones ganaderas a las direcciones municipales y en recorridos que hemos hecho, sabemos que ha habido siniestros, que estimamos son de entre el 2 y 3 por ciento de bajas del hato”.
En la apicultura, uno de los pilares económicos en la zona rural, hasta la semana pasada habían sido cosechadas unas cuatro mil 500 toneladas de miel, es decir, 50 por ciento menos con relación al volumen de 2016, debido a la falta de floración y pérdida de colmenas, pues las abejas emigraron en busca de alimento, ante lo cual se gestionan recursos para que los productores recuperen sus enjambres y reactiven la actividad.
Cada año se dan pérdidas de colmenas, ya sea por las condiciones climatológicas o por insectos depredadores, señaló Toledo Jamit, y reconoció que en el tema de la comercialización persiste el coyotaje, por lo que recomendó a los productores llevar su miel a los centros de acopio legalmente establecidos.
Enfatizó que la intensa sequía provocó afectaciones en las actividades productivas, y las quemas fuera de control y los incendios forestales también influyeron.
En el sector agrícola se tuvieron problemas con la producción de sandía, pero no por el estiaje, sino por enfermedades relacionados con su manejo. Fueron sembradas mil 600 hectáreas, cuyo rendimiento promedio fue de 35 toneladas porhectárea.
Toledo Jamit reveló también que por la falta de lluvias se desplomó la producción de mango en la entidad, y estimó una cosecha este año de apenas nueve mil toneladas, mientras que en 2016 fueron 16 mil. Sin embargo, los productores de Tikinmul, Emiliano Zapata, Cayal y Palizada, lograron mejor precio al alcanzar los seis pesos por kilo, o sea, casi el doble de los 3.5 pesos de 2016.