La Profepa aclaró que sólo se dictaron medidas para mejorar sus condiciones, y que no se aplicaron sanciones
Mérida, Yucatán, 24 de agosto de 2016.- El delegado de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa), José Lafontaine Hamui, aseguró que después de las inspecciones que realizaron este año a los zoológicos de Yucatán, no encontraron evidencias de maltrato animal en esos sitios.
Como se recordará, hace unos días esa dependencia informó que como parte del Programa Nacional de Inspección, encontraron algunas irregularidades en zoológicos yucatecos, por lo que fueron asegurados siete ejemplares en El Centenario anexo Mulsay y 6 más al Parque Zoológico y Botánico La Reina, de Tizimín.
Al respecto, el funcionario federal aclaró que sólo se trataron de medidas que se dictaron para mejorar las condiciones de esos lugares, y que no hubo inconsistencias que ameritaran sanciones económicas en contra de las autoridades municipales, como en años pasados.
“No se puede hablar de manera general en los zoológicos, pues algunas de sus zonas pueden modificarse y otras están bien. Pero, cabe recalcar, en ninguno encontramos evidencias de maltrato hacia los animales. Si fuera así, nos pondríamos en una disposición más agresiva”, sostuvo.
Lafontaine Hamui señaló que las medidas dictadas se pueden cumplir, por ejemplo, hay sitios de confinamiento que eran adecuados para los animales cuando eran pequeños, pero al crecer, los zoológicos tienen que reubicarlos, o hacer más amplios sus espacios.
“Tienen que estar pendientes de los animales. Un zoológico es como una casa, es decir, requiere de mantenimiento constante, y nosotros como Profepa estamos para vigilarlo”, agregó.
El delegado indicó que sí encontraran pruebas de cualquier maltrato hacia los ejemplares, o no se cumple con el trato digno, aplicarán la ley en contra de esos zoológicos, como lo han demostrado en años anteriores.
Además, aclaró que siempre privilegian que se cumplan las resoluciones, o sea, la restitución del daño al medio ambiente, más que cobrar las sanciones económicas.
“A veces las sanciones son más cómodas para los Municipios, pero lo que queremos es que hayan medidas en favor del ambiente”, explicó Lafontaine Hamui.
En cuanto a la situación del Parque La Reina de Tizimín, dijo que los animales ya están en mejores condiciones, pero que durante la administración municipal pasada hubo un fuerte enfrentamiento entre la Profepa y el ayuntamiento porque había casos lamentables de maltrato animal.
Ahora, con la nueva administración, se han mejorado las instalaciones y los cuidados de los animales de manera importante.
“El objetivo para la Profepa es preservar el bienestar animal, no permitir que la fauna y su confinamiento sean considerados un asunto político, porque los animales no tienen partido, y nosotros actuamos desde una perspectiva de neutralidad”, finalizó. (Herbeth Escalante; foto Cuauhtémoc Moreno)