Ante las acusaciones de «moches», el candidato panista asegura que su partido no es tapadera de nadie.
Mérida, Yucatán, 27 de marzo de 2014.- Tras la pifia que cometió anoche al declarar en un discurso proselitista que quiere ser presidente del PRI, Ernesto Cordero Arroyo se retractó esta mañana, “retiro lo dicho, ¡Dios me libre!”, señaló.
El aspirante a dirigir Acción Nacional ha sido blanco de burlas en redes sociales en las últimas horas, luego que declaró ante panistas de Mérida que quiere presidir al partido tricolor.
“¡Qué barbaridad, Dios me libre, toco madera”, dijo este día el senador con licencia en rueda de prensa, al minimizar esta controversia.
Cordero Arroyo negó que dicho tropiezo afecte su campaña en este proceso interno, en donde compite contra Gustavo Madero Muñoz rumbo al cambio de la dirigencia nacional panista.
También opinó sobre las investigaciones de la PGR en contra del coordinador de los diputados federales panistas, Luis Alberto Villarreal García por el presunto cobro de “moches” a alcaldes de Nuevo León y Guanajuato con el fin de otorgarles mayor presupuesto, señalando que el PAN “no es tapadera de nadie”.
“El PAN no es tapadera de nadie, y nosotros hemos sido los primeros en pedir que se investiguen estos señalamientos que se han ventilado en la opinión pública y se deslinden responsabilidades”, declaró.
En ese sentido, y a pesar de esas acusaciones de “moches”, precisó que el PAN en su “abrumadora mayoría sigue siendo un partido político honesto y transparente que impulsa la rendición de cuentas. (Herbeth Escalante; fotos de Lorenzo Hernández)
Aquí la reacción de Cordero: