Obama acuerda reforzar la cooperación en seguridad en una reunión con Corea del Sur y Japón. Dice que coincide con China en la implementación de sanciones a Pyongyang
Whashington 1 de abril de 2016.- Estados Unidos exhibió este jueves unidad ante el desafío nuclear de Corea del Norte con sus dos mayores aliados en Asia: Corea del Sur y Japón. El presidente Barack Obama acordó reforzar la cooperación en seguridad en una reunión conjunta con los líderes de ambos países. Más tarde, en una entrevista con su homólogo chino, Xi Jinping, dijo que la primera y segunda potencia mundial están comprometidas en la “implementación plena” de las sanciones de la ONU contra Pyongyang.
Las citas se celebraron antes del inicio de una cumbre sobre seguridad nuclearen Washington en la que participan delegaciones de una cincuentena de países.
China es un actor clave para frenar las ambiciones atómicas de Corea del Norte porque es su principal valedor. En los últimos meses, ha marcado distancias con el hermético país al criticar sus pruebas nucleares y permitir que el Consejo de Seguridad de la ONU impusiera hace cuatro semanas nuevas sanciones al régimen de Kim Jong-un por sus últimos ensayos.
Pero la incógnita es cuán dispuesto está Pekín a presionar a Pyongyang. China esgrime que la crisis norcoreana no se solucionará con sanciones sino con la reanudación de negociaciones internacionales, que naufragaron en 2008.
Desde 2006, la ONU ha adoptado cinco resoluciones con sanciones contra Corea del Norte que imponen prohibiciones a la compraventa de armas y al acceso a mercados financieros, y congelan activos e impiden viajar a determinados funcionarios. Las resoluciones no han evitado que el empobrecido país asiático siga haciendo pruebas nucleares y balísticas.
Antes del inicio de la reunión con Xi, Obama dijo a la prensa que ambos líderes están comprometidos con la “desnuclearización” de la península de Corea y que hablarían de cómo desalentar las provocaciones norcoreanas. Xi destacó la «comunicación y coordinación efectiva» entre ambas potencias en el asunto nuclear norcoreano y abogó por reforzarla, pero no hizo ninguna crítica al régimen de Kim ni referencia a si está dispuesto a presionarlo más.
Tras la reunión, ambos países declararon, en un comunicado conjunto, su compromiso con los futuros desafíos nucleares y con un marco de seguridad nuclear más “inclusivo, coordinado, sostenible y robusto”, y anunciaron una mayor cooperación mutua en ese ámbito.
Del encuentro anterior entre Obama, y su homóloga surcoreana, Park Geun-hye, y el primer ministro japonés, Shinzo Abe, tampoco salió un compromiso concreto, pero sirvió para mandar un mensaje de firmeza a Pyongyang. La cita, según la Casa Blanca, evidenció la “determinación y habilidad de contrarrestar la amenaza” de Corea del Norte.
“Hemos acordado que la cooperación trilateral en seguridad es esencial para mantener la paz y estabilidad en el noreste de Asia, disuadir la amenaza nuclear de Corea del Norte, y la potencial proliferación nuclear como consecuencia de las actividades de Corea del Norte”, dijo el presidente, junto a Abe y Park, tras el encuentro.
En una petición implícita a China, Obama instó a la comunidad internacional a ser «vigilante» en la implementación de las sanciones de la ONU. Su homóloga surcoreana explicó que los tres países acordaron coordinar mejor sus respectivos castigos a Pyongyang. EE UU endureció hace dos semanas el embargo comercial sobre el régimen norcoreano. (Con información de El País)