Las familias tuvieron de donde escoger para pasarla bien.
Mérida, Yuc. 06 de febrero de 2016.– Plaza Carnaval abrió sus puertas a la alegría y la diversión este viernes, cuando recibió a miles de familias que desafiaron los inconvenientes del clima para disfrutar las actividades que el Ayuntamiento y los patrocinadores de las carnestolendas organizaron.
Horas antes de que se iniciara el Desfile de Corso, programado para las 8 de la noche, la gente comenzó a apropiarse de las instalaciones. Se pudo observar a las familias recorriendo las instalaciones de Plaza Carnaval para ubicar los diferentes foros donde se realizarán actividades para todos los gustos.
Batucadas, activaciones, teatro con payasos y hasta el arte urbano ucraniano se hicieron presentes en la bienvenida a
los miles de meridanos que desde hoy dieron inicio formal a la fiesta carnavalesca.
La “Ciudad de los felices”, habilitada en la Nave de la Canacintra, recibió un constante flujo de familias para disfrutar de juegos inflables, espectáculos artísticos, acrobáticos y circenses, así como espectáculos de botargas, payasos y magos, entre otras actividades.
Los niños, muchos luciendo disfraces de súper héroes, princesas, bailarinas, animalitos, pusieron la nota de color y alegría a esta pequeña “ciudad” que hizo honor a su nombre.
Otra actividad que atrajo a chicos y grandes fue la exhibición de perros de la raza afgano, que el Grupo Galgo Afgano Pro Cultura Animal ofreció hoy, y también lo hará mañana, en la zona Bud Light de Grupo de Modelo, antes y después de los desfiles.
Al término del desfile, muchos de los asistentes acudieron a la zona de exhibición de carros alegóricos para tomarse las fotos del recuerdo.
La firma de autógrafos por parte del actor Rafael Amaya atrajo también a un gran público, en su mayoría mujeres, que no quisieron perderse la oportunidad de llevarse una foto del recuerdo con el popular artista.
En esta primera jornada, Plaza Carnaval fue también un escaparate para dar a conocer las obras de artesanos del Museo Popular de Arte Mexicano, que llevó a los alebrijes gigantes para el desfile, así como piezas de artesanía para vender.
También al término del desfile, la nave de la Canacome se transformó en zona Cosplay, donde chicos y grandes participaron disfrazados de sus personajes animados preferidos, en un ambiente de fantasía.
La llegada de visitantes fue constante durante la jornada y se vio mejor organizada al tener autobuses para los diferentes puntos de la ciudad.
Asimismo, un ejército de trabajadores de Servicios Públicos Municipales estuvo activo durante la jornada para limpiar, recoger basura y vaciar botes.