Bloquearon la calle que conecta con la planta trituradora Procon, ya que el polvo cubre sus casas y la vegetación, y provoca enfermedades.
Kanasín, Yucatán, 10 de abril de 2015.- Vecinos de la colonia Cuauhtémoc del municipio de Kanasín, protestaron este viernes en contra de la empresa Procon, dedicada a fabricar material para la construcción, ya que desde hace 30 años viven entre polvo y ruido.
Desde temprana hora, decenas de personas bloquearon una de las calles que conecta con la fábrica, por lo que más de 60 tráilers y volquetes que iban a transportar polvo y grava, no pudieron avanzar por varias horas.
La inconformidad de los vecinos radica en que su calidad de vida ha sido violentada, debido a que el polvo cubre sus viviendas, y ha provocado enfermedades a sus hijos.
“Quieres comer carne empanizada, y sólo con el polvo queda empanizado, nuestros alimentos están contaminados, no podemos vivir así, estamos hartos”, declaró el vecino Francisco Sosa Mendoza, al quejarse de la planta trituradora.
Otra inconforme, Natalia Ek Baas, señaló que debido al polvo, una de sus hijas sufre constantes infecciones en sus ojos, por lo que decidió mandarla a vivir con sus familiares en Mérida.
“Somos como tres mil familias afectadas, nuestras casas están cuarteadas, debido a que en la noche usan dinamita para hacer perforaciones para fabricar polvo… el polvo no te deja salir, no te deja comer, nuestra ropa siempre está sucia”, agregó.
Todas las casas de la colonia Cuauhtémoc, los automóviles, las calles y hasta los árboles están cubiertos de polvo. La fábrica Procon trabaja prácticamente todo el día, y debido a las explosiones que ejecutan en su interior, muchas viviendas han sufrido afectaciones en sus estructuras por los temblores.
Al lugar de la protesta llegaron elementos de la Policía Municipal de Kanasín, quienes intentaron ser mediadores entre los vecinos y los representantes de la empresa, pero no llegaron a ningún acuerdo.
“Queremos que se vaya Procon de Kanasín”, gritaban los enojados vecinos, por lo que incluso bloquearon otra calle aledaña, cuando los tráilers intentaron alejarse de la zona de conflicto.
Los inconformes lamentaron que la fábrica no cumplió los acuerdos ni las recomendaciones que emitió hace unos años la Secretaría de Desarrollo Urbano y Medio Ambiente. (Herbeth Escalante)
