Expertos advierten, mientras presidente reclama a rebeldes hutíes salir de Saná
Yemen, 22 de marzo de 2015.- El presidente de Yemen, Abd-Rabbu Mansour Hadi, acusó ayer a la milicia hutíe que controla la capital, Saná, de realizar un golpe de Estado en su contra y dijo que “izará la bandera de Yemen” en el bastión de los hutíes al norte del país, mientras expertos advertían del riesgo de una guerra civil.
Desde la ciudad de Adén, en el sur del país, adonde huyó el mes pasado tras escapar del arresto domiciliario impuesto por los hutíes, Hadi los llamó a retirar sus fuerzas de ministerios estatales, a devolver las armas que capturaron del ejército y a abandonar Saná.
“Daremos seguridad al país e izaremos la bandera de Yemen en el Monte Marran en Saadeh en vez de la bandera iraní —país al que acusa de ser aliado de los hutíes—”, declaró en un discurso emitido por televisión, el primero desde que llegó a Adén —que declaró capital temporal yemení— y un día después de los atentados suicidas en dos mezquitas chiítas en Saná que dejaron 137 muertos y que se adjudicó el Estado Islámico (EI).
El Comité Revolucionario Supremo de los hutíes, que defienden las tradiciones religiosas de la minoría chiíta conocida como zaidismo, a la que pertenece casi 30% de la población de Yemen, emitió un comunicado en el que si bien no respondió directamente al discurso de Hadi, convocó a una “movilización general” de las fuerzas armadas contra la “guerra sucia” que, dijeron, libran milicias leales al presidente.
“El comité anuncia su decisión de convocar a los orgullosos hijos del pueblo yemení a unirse, apoyar y cooperar con las fuerzas armadas y de seguridad para confrontar a las fuerzas terroristas”, señaló el comunicado.
Expertos advirtieron del riesgo de que se produzca una nueva guerra civil en el país más pobre del mundo árabe, que apenas logró la unidad en la década de 1990.
“Odio decirlo, pero escucho el sonido fuerte y claro de los tambores de guerra en Yemen”, afirmó Mohamed al-Basha, portavoz de la embajada yemení en Washington, D.C., en un mensaje en Twitter.
Los hutíes capturaron en septiembre Saná, la cual controlan, así como nueve de las 21 provincias del país.
El Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas se reunirá hoy para tratar la situación en Yemen, luego de que Hadi pidiera en una carta la “intervención urgente” del cuerpo y una resolución para “disuadir a las milicias hutíes y sus aliados, de detener su agresión (…) y apoyar a la autoridad legítima”.
En todo caso, Hadi dejó la puerta abierta a un acuerdo negociado al llamar a los hutíes y otros grupos a asistir a conversaciones de paz en Arabia Saudita. Los países sunitas del golfo Pérsico apoyan a Hadi y trasladaron sus embajadas a Adén.
Hadi, cuyo cuartel en Adén ha sido blanco de bombardeos en los últimos días, afirmó que Yemen debe volver a la situación política existente antes de que los hutíes tomaran el control de Saná, restituyendo la Constitución e implementando los resultados de un proceso nacional de diálogo y de transición política patrocinada por los países del golfo Pérsico. Reuters y AP