Predomina más en las mujeres de 40 y 60 años
Mérida, Yucatán, 2 de junio del 2021.– La fatiga crónica es un padecimiento que de no recibir tratamiento médico a tiempo, afecta severamente la calidad de vida al grado de dejar postrado en cama a quien la padece. Esta enfermedad predomina más en las mujeres, entre los 40 y 60 años de edad.
Especialistas señalan que la fatiga crónica será uno de los problemas a tratar como secuela de la pandemia del COVID-19, ya que la infección por el SARS-CoV-2 propicia una disfunción inmunológica, endocrino-metabólica y factores neuropsiquiátricos. Estas afectaciones derivan en más de 50 síntomas Post-COVID entre los que se encuentra la fatiga crónica
Por su parte, el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) señala que esta enfermedad denominada encefalomielitis miálgica, puede limitar la capacidad para realizar las actividades cotidianas de los pacientes diagnosticados debido a que un síntoma común es la fatiga intensa, que no se alivia con el descanso. Este síntoma no tiene relación con otras enfermedades.
Entre los síntomas de la fatiga crónica se enlistan: la dificultad para conciliar el sueño, dolor corporal, mareos, dificultad para concentrarse o realizar actividades que requieran de cierto esfuerzo mental, sueño no reparador, malestar que empeora tras la realización de un esfuerzo o actividad física o mental e inflamación de los ganglios linfáticos.
Aunque existe una gran variedad de investigaciones al respecto de este padecimiento, no se han logrado determinar las causas exactas que podrían desencadenarlo. Sin embargo, se considera que el origen podría ser diversos factores como las infecciones, los altos niveles de estrés a nivel físico o mental, desequilibrios hormonales y problemas a nivel del sistema inmunológico.
Lo que si se ha logrado determinar es que existen algunos factores de riesgo o predisponentes que pueden desencadenar esta enfermedad, como son: ser de raza blanca, ser mujer y estar en el rango de 40 a 60 años de edad.
Para el diagnóstico de la fatiga crónica, los especialistas requieren realizar una variedad de pruebas clínicas o exámenes médicos y así como realizar un diferencial, es decir descartar una variedad de enfermedades que puedan presentar signos similares.
El tratamiento de este padecimiento se centra en la disminución o alivio de los síntomas, con la finalidad de mejorar la calidad de vida del paciente.
El IMSS en Yucatán recomienda que si se presenta alguno de los síntomas mencionados, es importante acudir a su médico familiar para descartar el diagnóstico de fatiga crónica y evitar posibles complicaciones, como depresión, aislamiento social y disminución considerable del estilo y calidad de vida.
El Seguro Social también aconseja el uso de productos alimentarios biológicos, sin grasas animales ni lácteos de origen animal; y ponerse bajo la supervisión de un especialista para realizar una rutina básica de ejercicio con la finalidad de evitar que con el paso del tiempo, se llegue a presentar una atrofia muscular u otras enfermedades reumáticas o neurológicas derivadas de la fatiga crónica
También se sugiere que estos pacientes cuentan con el acompañamiento de redes de apoyo de familiares y/o amigos, así como el seguimiento por parte de un especialista en salud mental.
Desde el Balcón*