La especie vegetal ha motivado una reforestación y proyectos en la comunidad de Chocholá
Mérida, Yucatán, a 29 de septiembre de 2019.- El trabajo de investigación para el aprovechamiento del árbol de ramón que realizan científicos yucatecos ha generado interés de empresas las cuales han invertido en la siembra de este especie vegetal.
De acuerdo con el Centro de Investigaciones Científicas de Yucatán (CICY), empresas como Kishur se ha sumado a este proyecto y se ha consolidado como una sociedad de producción rural en el municipio de Chocholá.
Ramón Gómez Ramírez, uno de socios de la compañía, señaló que los resultados de los estudios les abrió el panorama para confirmar el interés por el árbol de ramón.
Comentó que Kishur trabaja en un programa del CICY y con la asesoría de Alfonso Larqué Saavedra, por lo cual han logrado la siembra de 27 mil árboles ramón en 42 hectáreas de terreno y un vivero que permitiría producir un millón de plantas para que, en coordinación con las instancias gubernamentales, se pueda reforestar una parte de la Península de Yucatán.
Dijo que Kishur se ha propuesto que la mujer sea la protagonista principal de este proyecto, al contratar a 15 jefas de familia de la comunidad de Chocholá para que mejoren su situación económica.
“Los empresarios en México tienen que dejar de ser personas que sólo ponen capital, tienen que hacer un esfuerzo por entender los procesos y las consecuencias medioambientales y de impacto social de sus acciones; de esta manera, se puede crear una mayor conciencia para que se tomen mejores decisiones para este país”, expuso, Ramón Gómez.
Cabe señalar que desde el 2018, como resultado del impulso al proyecto del árbol ramón en Yucatán, el Consejo Estatal de Ciencia y Tecnología y la Secretaría de Desarrollo Rural de Campeche, así como con la de los directores de siete instituciones académicas del sur-sureste del país, crearon en el vecino estado el “Centro para la conservación y aprovechamiento del Ramón”.
Las investigaciones del CICY sobre el árbol, de ramón ofrece soluciones y alternativas para la solución de problemas como el hambre y promueve la vinculación entre la comunidad científica y el sector productivo.
Jorge Euán