Por una ‘pesada carga de trabajo’ y por un presunto regaño, ambos directores municipales dejaron el puesto.
Kinchil, Yucatán; 18 de abril de 2019 (ACOM).- Un inicio de semana crítico tuvieron las corporaciones de Kinchil y Celestún al renunciar sus respectivos jefes policíacos, por diferentes circunstancias.
El primero en dar la noticia fue el director de Kinchil, José Antonio Borges Chi (a) «Chico Borges», quien pidió al edil Valentín Pech Dzib, su baja voluntaria debido a la pesada carga laboral; aparte de no contar con suficiente personal.
Aunque el munícipe Pech Dzib no ha hecho público quien será el nuevo encargado de la seguridad local, suena el nombre de Rogelio Alberto Rodríguez Balam, vecino de Tamchén.
Por otra parte, en Celestún municipio vecino de Kinchil, por un presunto accidente a bordo de su patrulla municipal la noche del pasado lunes, recibieron una fuerte llamada de atención por la alcaldesa Yulma García Casanova.
Ante este regaño, renunciaron casi una decena de uniformados y hasta el director policíaco Gonzalo Vera Sosa.
Los ex policías alegaron que se trató de un malentendido, «pues al llevar a un detenido, este se cayó de la cama de la unidad, y la gente lo denunció en las redes expresando que lo atropellamos» abundaron.
Vera Sosa quien igual funge como asesor de las policías de la región, es otro de los candidatos a asumir el vacante puesto en Kinchil, pues ha estado en las direcciones de policía de Ucú y Hunucmá.