La escalada de precios en productos hará que no se sienta el alza
Mérida, Yucatán, 4 de enero de 2020.- La escalada de precios que se avecina hará que el aumento al salario mínimo que entró en vigor este 1 de enero se diluya, toda vez que el poder adquisitivo de los yucatecos se verá afectado por alzas en productos como galletas, refrescos, huevos y otros.
Laura Can Brito, asesora financiera y docente de la Universidad del Mayab, señaló que este incremento no se verá reflejado en los aumentos a los salarios, pues es un porcentaje muy bajo de trabajadores los que perciben un salario mínimo.
En cuanto a los incrementos, se pudo constatar en un recorrido por supermercados y tiendas abarroteras que aún no aplican estos incrementos por tratarse de mercancía de “stock”, comprada el año pasado a precios todavía bajos, pero ya para el próximo lunes tendrán un re etiquetado de muchos de ellos.
Sin embargo, se pudo constatar que el primero en elevar sus productos fue Bimbo, que aumentó $2.00 a su línea de pan de caja en todas sus versiones. Mientras que marcas como Gamesa, Modelo, Sabritas, Barcel, Nestlé, Lala, Alpura, Marinela y Tía Rosa anunciaron que sus productos tendrían ajustes a partir del 2 de enero de 2020, pero aún no llegan a resurtir a todas las tienditas.
Por otro lado, la Asociación Nacional de Pequeños Comerciantes (ANPEC) advirtió que este aumento se verá pulverizado por la carestía en los precios de la canasta básica, así como por la actualización del impuesto como el Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS) a gasolinas y diésel.
El incremento de estos costos se apreció desde el viernes 3 de enero, cuando en las principales gasolineras de Yucatán se notaron alzas de hasta 50 centavos en los combustibles. Esto, a decir de productores, encarecerá artículos como pan, tortillas, legumbres y azúcares.
Esto, a pesar de tener una de las tasas de inflación más bajas de la historia. “Tenemos una tasa de inflación de 2.8 por ciento y en teoría ese debería ser el incremento máximo de los productos, pero no es así, porque los impuestos son una carga que debe ser sumada y al final, es el consumidor el que la paga”, señaló Can Brito.
El dato
De acuerdo con el Centro de Análisis Multidisciplinario de la Facultad de Economía de la UNAM, en 30 años la población mexicana ha perdido hasta un 80% de su poder de compra, el cual se refleja en su salario mínimo principalmente al intentar abastecer su Canasta Básica.
Eduardo Herrera