La crisis de los jóvenes desaparecidos fulmina al gobernador de Guerrero.
Guerrero, 24 de octubre de 2014.- Tras 26 días del vendaval que sacude a México por la desaparición de 43 normalistas de Ayotzinapa, se va una figura que desde hace 30 años parecía inamovible en el horizonte convulso de Guerrero, su gobernador, Ángel Aguirre.
El hombre que durante décadas, primero en el PRI, y desde 2010 en el PRD, movió los hilos de las trama en el estado más violento y pobre del País, pidió licencia ayer tras una chirriante resistencia de cuatro semanas durante las que no hubo apenas voz que no reclamase su caída.
“En este escenario de tragedia me niego a que el debate se centre en si el Gobernador debe permanecer o no”, dijo Aguirre, “la prioridad debe ser continuar con la búsqueda de los jóvenes y garantizar que los responsables de estas violaciones a los derechos humanos sean castigados”.
“Para favorecer un clima que ponga la atención en solucionar esta prioridad, he decidido solicitar licencia al honorable Congreso del Estado de Guerrero, que decidirá quién debe encabezar este esfuerzo en los próximos meses”, añadió.
Aguirre presentó su renuncia luego de que se lo pidió la dirigencia nacional del PRD, según explicó el presidente Carlos Navarrete, en una rueda de prensa realizada después de la de Aguirre.
“El PRD está a favor de una investigación que dé un resultado rápido, y vamos a contribuir a que el gobierno del Estado de Guerrero contribuya a ello”, dijo Navarrete, que calificó el “caso Iguala” de “tragedia”.
El percutor de la dimisión fue el asesinato, secuestro y desaparición de los normalistas en Iguala a manos del narco y la Policía Municipal.
Padres y compañeros de las víctimas señalan al Gobernador como principal responsable político. Durante su mandato, Guerrero se precipitó por un sumidero de violencia y el narcotráfico se adueñó del territorio imponiendo su ley.
La salida de Aguirre le da un respiro al presidente Enrique Peña Nieto, cuya administración detuvo al líder de Guerreros Unidos, el cártel cuyos sicarios participaron en el crimen y secuestro de normalistas.
Ahora se despeja mínimamente el escenario político, pero no frena la cuenta regresiva abierta por la desaparición de los estudiantes.
Los agentes federales, encabezados por el investigador número uno de México, Tomás Zerón, el hombre que capturó al “Chapo” Guzmán, mueven cielo y tierra para dar con los alumnos de la Escuela Normal Rural de Ayotzinapa. Pero cada día que pasa sin resultados, la desconfianza aumenta.
El escepticismo se ancla en capítulos como la fuga del Alcalde de Iguala, su esposa y su jefe de Policía, tres de los principales implicados, y cuya captura es prioridad.
Lo urgente, sin embargo, sigue siendo hallar a los estudiantes. Familiares y una constelación de grupos sociales, ya han dejado sentado que sólo admiten un desenlace: “Vivos se los llevaron, vivos los queremos”. © EL PAIS, SL. Todos los derechos reservados.
FECHAS CLAVE
Septiembre
26. Mueren 6 personas -3 normalistas- a manos de policías. Desaparecen estudiantes.
Octubre
2. Buscan en Guerrero a 43 alumnos.
8. Miles marchan en 20 estados del País y el mundo exigiendo justicia.
15. Se ubican 19 fosas clandestinas. Restos no son de estudiantes, dicen.
22. PGR imputa a Alcalde de Iguala y su esposa con la desaparición.
23. Ángel Aguirre, pide licencia como Gobernador.