Señalaron que el delegado José Lafontaine Hamui debería ser removido de su cargo
Mérida, Yucatán, 27 de septiembre del 2018.- La activista del grupo Indignación, Martha Capetillo Pasos negó que se haya privado de la libertad o torturado a los inspectores de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (PROFEPA), durante la protesta realizada en Homún el pasado viernes. Señaló que las declaraciones del delegado José Lafontaine Hamui, sobre denunciar a los pobladores de Homún son amenazas graves, cuyo objetivo es criminalizar el movimiento, y que por ello el funcionario debería ser removido de su cargo.
Como se ha informado en Desde el Balcón, ciudadanos de Homún protestaron en la mega granja porcícola de ese municipio el viernes 21 de septiembre, ya que temen que contamine el agua de esa localidad. Sin embargo, ese mismo día inspectores de la PROFEPA clausuraron las instalaciones de cinco cooperativas turísticas. Ante dicho suceso, los pobladores se movilizaron y visiblemente enojados solicitaron a los trabajadores retirar los sellos de clausura para dejarlos ir.
Finalmente los inspectores accedieron a quitar los cintillos de tres cooperativas. Posteriormente, Lafontaine Hamui declaró para medios de comunicación locales que emprenderá acciones legales por la privación ilegal de la libertad de los trabajadores.
Al respecto, Martha Capetillo expresó que la acción del delegado es una amenaza de criminalización del movimiento de los pobladores de Homún. Recalcó que la clausura de las cooperativas fue una “represalia orquestada, una provocación” hacia los ciudadanos.
A su vez, negó que se hayan suscitado los delitos que el funcionario indicó. “La policía estuvo presente en todo el recorrido y hubo reclamos con molestia, pero no se pueden tomar como privación ilegal de la libertad. La gente tenía mucha rabia, pero contenida”, dijo.
De igual forma, comentó que no solo los inspectores caminaron largas distancias, como se ha descrito en algunos medios locales, ya que las camionetas de la PROFEPA bloqueaban los accesos. “La misma PROFEPA cerró el camino, todos fueron caminando e incluso cuando una persona se sintió mal se le llevó a la policía y se solicitó que la llevaran al médico”, detalló.
La activista comunicó que hasta ahora los pobladores no han recibido la notificación de alguna demanda, pero reiteró que esa medida “es una grave amenaza contra los pueblos” y que significa la criminalización del movimiento. “Ese y las inacciones ante los daños al medio ambiente deben ser motivos para remover al delegado de la PROFEPA de su cargo”, puntualizó.
Finalmente, negó que esta situación detenga las protestas de los pobladores de Homún, ya que el movimiento tiene más de un año operando “con todo tipos de amenazas”.
PROPONEN CREAR UN CUERPO COLEGIADO PARA VIGILAR LA GRANJA
Por otro lado, el arqueólogo Sergio Grosjean Abhimeri, expresó que en todo el estado hay granjas y que aún no se sabe qué tanto puede impactar la operación de la mega granja porcícola de Homún en los cenotes de la zona. “Mientras funcionen bien los equipos, esperemos que no haya ningún problema pero nadie puede asegurar nada”, dijo.
Añadió que si la empresa cumple con todos los requisitos interpuestos por las autoridades estatales y federales, se le debe permitir entrar en funciones, pero sugirió integrar un cuerpo colegiado de académicos para monitorear y vigilar que la granja opere correctamente. (Lilia Balam)