Consideran que no se hicieron los estudios técnicos ambientales correctos ante Semarnat
Mérida, Yucatán, 20 de julio de 2017.- Ejidatarios de Motul no quieren que se construyan parques eólicos en su localidad. Esta mañana aproximadamente 30 campesinos protestaron en Palacio de Gobierno para exigirle a las autoridades que intervengan para evitar que se levanten esas obras.
En la manifestación sostuvieron que las empresas extranjeras ALDESA y ALDENER amenazan constantemente a los ejidatarios e intentan involucrar “grupos de choque” en el ejido para apoderarse de sus tierras y construir esas plantas.
La situación se complicó más luego que los ejidatarios presentaron una denuncia en la Sala Federal Especializada en Material Ambiental del Tribunal de Justicia Administrativa, que el pasado primero de junio decretó la suspensión de los proyectos de esas compañías.
Los campesinos interpusieron esa demanda porque consideran que no se hicieron los estudios técnicos ambientales correctos ante la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat).
Por el momento, los pobladores lograron detener los parques eólicos llamados Chacabal 1 y Chabacal 2, que las empresas españolas pretenden levantar en las tierras de uso común que se encuentran entre Suma de Hidalgo y Motul.
“Las empresas quisieron entrar a nuestro ejido, nos quisieron rentar nuestras tierras por 30 años con pago de 50 ó 20 pesos cada dos meses, o sea una miseria. Como nos opusimos durante todo este tiempo nos han estado amedrentando y ahora quieren que desistamos de las demandas”, sostuvo Julio César Balam Escamilla, asesor del ejido.
Los ejidatarios recalcaron que continuarán con el proceso legal para defender su medio ambiente, pues temen que de construirse dichas plantas se destruirá la selva de la zona, provocarán la desertificación de las tierra, además de que se afectará la vida cotidiana de la población.
Balam Escamilla acusó públicamente al asesor jurídico Rafael Acosta Solís de ser quien acosa a los ejidatarios -contratado por ALDESA y ALDENER- y que incluso manda grupos de choque para impedir sus asambleas ejidales y fragmentar a la comunidad.
Cabe recordar que con la Reforma Energética, el Gobierno federal realizó subastas de largo plazo para que empresas particulares produzcan energía eléctrica para vender a la Comisión Federal de Electricidad (CFE), priorizando las “energías renovables”. En ese contexto, se autorizaron instalar nueve plantas –entre eólicas y fotovoltaicas- en diferentes localidades de Yucatán. (Herbeth Escalante; fotos de Guillermo Castillo)