Sin embargo hay quienes dicen que es poco viable la reinserción de los delfines por la falta de condiciones de los mismos mamíferos y de hábitats
Playa del Carmen, 31 de jul. de 16.- Urgen a delfinarios acelerar proceso de conversión a santuarios para alinearse a los tratados internacionales firmados por México, desde hace casi 25 años, como parte de una evolución positiva en el trato que se le da a este mamífero marino.
Esto se dio a conocer, después de que especialistas reiteraran que el modelo en el que operan dichos negocios en nuestro país, incumplen con el Convenio de Biodiversidad Biológica firmado por México en la COP de Río de Janeiro del 1992.
Según explicó Mónica Chavarría, presidenta de la asociación ProAnimal, el tema se debe priorizar ante la llegada de este evento a Quintana Roo a finales del presente año.
“Nosotros hemos trabajado una propuesta elaborada desde varias disciplinas; desde biólogos, veterinarios, abogados, activistas y lo que plantea es formar parte de la transformación a un lugar en donde se de destino y descanso a los delfines de mayor longevidad y que aquellos que acaben de nacer se les pueda rehabilitar para un proceso de liberación. Habrá delfines que no podrán pero los mismos dueños de delfinarios pueden tener hasta más ingresos con un plan de negocios pero abriendo la conciencia ambiental”, dijo la también coordinadora de la Red Estatal de Bienestar Animal.
Sin embargo, Roberto Sánchez Okrucky, director de Medicina Veterinaria de la empresa Dolphin Discovery y quien lleva casi 30 años trabajando con esta especie en Quintana Roo, señaló que es poco viable la reinserción de los delfines por la falta de condiciones de los mismos mamíferos y la falta de hábitats.
Reconoció que es un tema que se ha planteado entre las empresas que operan los delfinarios en el país, aunque aseguró que existen complicaciones multifactoriales.
Sánchez Okrucky enfatizó que el ejemplo de los animales de los circos después de que se aprobara la ley del Partido Verde, en la que se había prometido santuarios, reintegrarlos a su hábitat natural y que al final un estimado del 80% de esos animales están muertos.
“Los zoológicos y lo delfinarios, aunque mucha gente no lo quiera creer, son centros donde se hace investigación sobre fauna silvestre y técnicas de conservación para los animales de vida silvestre en el poco hábitat que les queda. Se han rescatado especies en peligros de extinción”, dijo el veterinario especialista en delfines.