Estos adultos mayores se dedican a la mendicidad, el análisis incluyó encuestas a 70 indigentes
Mérida, Yucatán, 21 de mayo de 2016.- La mayoría de las personas en condiciones de mendicidad son adultos mayores que están en esa situación por la falta de atención de sus familiares y no por carecer de ellos, revela un estudio realizado por el departamento de Trabajo Social del DIF Municipal de Mérida.
El Estudio de la Mendicidad realizado, principalmente, para detectar la situación económica y familiar de las personas en esa condición incluyó encuestas a 70 indigentes y sus resultados indican que 43 tienen más de 60 años.
De lo anterior se deduce que la población de mendigos del primer cuadro de esta ciudad está integrada en su gran mayoría por adultos mayores.
Según las trabajadoras sociales del DIF municipal del Ayuntamiento de Mérida, el estudio indica también que un elevado número de casos de mendicidad de adultos mayores en esta ciudad tiene relación con la omisión de cuidados de sus familiares.
Entre las principales causas por las que los familiares de estos adultos mayores no se hacen responsables de ellos destacan que no sienten el compromiso ni el deseo de hacerlo, ya que sus padres, ahora personas mayores de 60 años de edad, les dieron malos tratos en su niñez, no ejercieron su paternidad o maternidad, dejando esta responsabilidad a otras personas, o los abandonaron.
El Estudio de Mendicidad también indica que 31 personas que piden limosna obtienen ingresos menores que $100 diarios; 31 más obtienen de $100 a $200.
En pláticas con los adultos mayores encuestados, las trabajadoras sociales detectaron que hay varios casos en que los mismos hijos o nietos llevan a sus padres o abuelos a pedir limosna, los dejan en algún sitio y pasan por ellos varias horas después, como si cumplieran una jornada laboral.
Mientras se levantaban las encuestas, en horario matutino, vespertino y nocturno, las trabajadoras sociales intentaron canalizar a los mendigos, sin importar su edad, para que recibieran diferentes apoyos, pero éstos se mostraron renuentes a dejar de pedir limosna.
En la mayoría de los casos, estos indigentes se resisten porque tienen algún tipo de adicción, principalmente de alcoholismo, lo que también les ha ocasionado problemas de tipo psiquiátrico.
En los casos de adultos mayores cuyos familiares se niegan a atenderlos se les ofrece asesoría integral basada en la Ley para la Protección de los Derechos de los Adultos Mayores, que obliga a los hijos, hermanos o nietos, a responsabilizarse de las personas mayores a su cargo.