Se han desmontado 4 mil hectáreas y están por desmontarse otras 500
HOPELCHEN, Cam. 01 de noviembre de 2015.– Un total de cuatro mil hectáreas de selva desmontaron hace dos años los menonitas, a un costado de las tierras fértiles de Francisco J Mujica, y están por desmontar otras 500, mencionó el comisario municipal de Cancabchén, Jorge Várguez Teh.
El recién integrado a sus funciones, agregó que por esos desmontes en Los Chenes se levanta mucho polvo, pero todo se debe a órdenes del gobierno saliente, de esta manera de nada sirve clausurar predios de los menonitas si la misma autoridad los complace con otorgar los permisos.
El comisario acudió a una reunión apícola en la Casa de la Cultura para escuchar los pros y contras de la producción de la miel, donde también se enteró de la soya transgénica que provoca daños irreversibles y que podría ser cancelada la compra por la Unión Europea; y para ello se debe cuidar los montes de la tala inmoderada y por los usos inadecuados de los químicos como es Glifosato, entre otros, que provocan cáncer, dato proporcionado por la Organización Mundial de la Salud.
El caso es que las mismas autoridades han dado rienda suelta a la siembra de la soya y es más la cantidad que siembran, pero no surten ni el 10 por ciento de lo que necesita la industria alimentaria de la ciudad de Mérida, Yucatán.
Precisó la magnitud de la soya que se cultiva en los terrenos nacionales a espaldas de Chenkoh, 4 mil hectáreas y lo peor de todo es que se fumiga con avioneta la siembra que está a punto de concluir. Dijo que es un revés para las abejas, pues muchas se mueren o son contaminadas con el Glifosato y por la cobertura amplia de los menonitas podría afectar esta próxima cosecha y ellos son los únicos culpables.
Abundó que el mismo gobierno estatal y nacional están de acuerdo y propusieron la siembra de soya con más de 220 mil hectáreas y las clausuras de predios es una tapadera de ojo al macho.
Várguez Tec opinó que por eso la Suprema Corte de Justicia de la Nacion (SCJN) no la tiene tan fácil para emitir su fallo a favor de Monsanto o a favor de los 7 amparos promovidos por los indígenas mayas y, como dicen, “donde manda capitán no gobierna marinero”, saben que es el interés del mismo gobierno que quiere que se detenga la siembra de maíz para meter soya, pues la demanda es mayor y al mismo gobierno no le interesa el pulmón de la selva para el auxilio de la humanidad.
Insistió en que las organizaciones civiles, entre otras sociedades, deben protestar porque se está acabando con la naturaleza y con la verdadera fauna y flora del municipio. (Por Esto)