El reconocido autor invita a los literatos yucatecos a ir más allá del terruño.
Mérida, Yucatán, 26 de septiembre de 2015.– Yucatán se ha distinguido por una producción literaria que ha trascendido en el país, no obstante es necesario que las nuevas generaciones de escritores abran sus horizontes y se arriesguen a mostrar sus creaciones más allá del terruño, señaló el poeta Agustín Monsreal.
Entrevistado en el marco de su participación en el Congreso “Estética, discurso y entorno: 200 años de literatura yucateca” que se realiza en esta capital, el autor del libro La banda de los enanos calvos remarcó que esta tierra siempre ha sido cuna de grandes literatos, pero insistió en la urgencia de que los actuales creadores decidan superar los límites estatales.
“Yucatán es una tierra rica en todo, sobre todo por las actividades culturales que no hay en otras partes, pero es necesario abrir más puertas para hacer eco por todo el mundo”, puntualizó el también ganador del Premio Nacional de Cuento y Poesía, originario de esta entidad.
Como parte del Congreso “Estética, Discurso y Entorno: 200 años de literatura yucateca”, Monsreal participó en el cierre de la jornada del viernes pasado con una lectura de obra, en la que dio voz al poema “Memoria de mi sangre y de mi carne”, del libro antes citado.
En la sesión, desarrollada en el Centro Cultural del Niño Yucateco, también participaron el poeta Raúl Renán, la ganadora del Premio Nezahualcóyotl de Literatura en Lengua Indígena, Sol Ceh Moo y el escritor Víctor Garduño, quienes igualmente leyeron sus poemas y cuentos.
Minutos después, el campechano Carlos Vadillo Buenfil, acompañado de la autora Kenia Aubry Ortegón, presentó su novela Te están buscando, en la que aborda temas como la guerrilla, corrupción, prostitución, tráfico de armas y violencia.
Vadillo Buenfil explicó que la historia que se desarrolla entre México y Colombia, tiene como hilo conductor las canciones de Gilberto Santa Rosa, Rubén Blades y Grupo Niche.
“En la novela todos se están buscando; es una cadena, una serie de peripecias entra la situación sociopolítica de las realidades de esos dos países”, apuntó.
A su vez, Kenia Aubry describió que la obra destaca por el placer de mostrar y engarzar historias de diversas realidades. “Nada es más grato que encontrar en una novela el peso de la tradición literaria”, expresó.
Como parte de los trabajos del encuentro, las literatas Cristina Leirana Alcocer y Melba Alfaro Gómez presentaron el libro El caracol, de Carolina Luna. Ambas coincidieron en que la autora, cuya creación se basa en la temática de la marginación y otras problemáticas sociales, es una de las más importantes cuentistas de los años 90.